Agentes federales y de la Policía diligencian, desde la madrugada del miércoles, 56 órdenes de arresto contra presuntos miembros de una ganga narcotraficante con base en Carolina.

Según documentos judiciales, la ganga en cuestión está supuestamente vinculada al asesinato del agente Eliezer Ramos Vélez, de 35 años de edad, en abril pasado, en Carolina.

De hecho, una moción radicada por la Fiscalía federal esta mañana, para solicitar que no se le conceda fianza a los acusados, indica que en las tempranas horas de la madrugada del 29 de marzo “miembros de esta ganga tratando de protegerse y su territorio de una presunta amenaza asesinaron a Eliezer Ramos Vélez en la línea de servicio”.

Del total de acusados, solamente cinco enfrenta cargos por asesinato. El pliego acusatorio los identifica como el principal imputado, Víctor Pérez Fernández, Andyel González Sáez, Olvin O’neill Concepción Tapia, Daniel J. López Vega y Luis N. Isaac Sánchez, mejor conocido como “CDobleta” en la industria de la música urbana.

El pliego acusatorio incluye, también, el nombre de Fernando Torres Galarza, agente adscrito al Negociado de Patrulla de Carreteras de la Policía de Puerto Rico y quien fue acusado y arrestado en el pliego acusatorio emitido por un gran jurado federal.

Los cargos contra el agente son por conspiración y distribución de sustancias controladas.

Más temprano, el jefe del Negociado Federal de Investigaciones en Puerto Rico (FBI, por sus siglas en inglés), Joseph González; el jefe de la Fiscalía federal, Stephen Muldrow; y el comisionado de la Policía explicaron que se trata de una organización criminal vinculada a múltiples crímenes violentos en conexión con una extensa operación de narcotráfico.

“Estamos con el diligenciamiento de 56 órdenes de a arresto con agencias federales, estatales y municipales relacionado con una organización criminal sumamente peligrosa del área del residencial sabana abajo vinculada a crímenes violentos en Carolina, Bayamón y San Juan”, explicó López Figueroa a El Nuevo Día.

Los arrestos se llevan a cabo en varios puntos de la zona metropolitana, incluyendo el residencial Sabana Abajo y La Esmeralda, ambos en Carolina. Las detenciones, encabezadas por el FBI, responden a una acusación emitida por un Gran Jurado federal, tras meses de una pesquisa que comenzó la Policía.

Un mes después del asesinato de Ramos Vélez, el comisionado de la Policía había asegurado que ya sabían quiénes eran los responsables de la muerte a tiros del agente estatal y padre de un niño de 9 años.

Ramos Vélez, quien fue el primer policía en morir en el cumplimiento del deber en el 2024, llevaba 12 años de servicio en la Uniformada y estaba adscrito a la División de Detección de Disparos de la Superintendencia Auxiliar en Operaciones Especiales (SAOE).

De acuerdo con los datos confirmados por la Policía, el 29 de marzo el sargento salía de trabajar a las 4:00 a.m. e iba rumbo a su hogar cuando se activó al ver a unos sujetos, a bordo de motoras y “four tracks”, que estaban realizando disparos en el expreso Ramón Baldorioty de Castro.

Acto seguido, emprendió una persecución mientras llegaban los refuerzos que había solicitado a través de su radio portátil al Centro de Mando de la Policía. La persecución culminó en el residencial Sabana Abajo, donde fue ultimado a tiros en el interior de su guagua Hyundai Tucson, color azul.

Posterior al crimen, la Policía señaló como “persona de interés” en el caso a Isaac Sánchez, pero no fue acusado de inmediato.

En cambio, un gran jurado federal le radicó cargos por violación a la ley de armas por una intervención policiaca que se remontaba a octubre de 2023.

Documentos judiciales de ese otro caso indicaron que Isaac Sánchez supuestamente “admitió haber estado presente en un grupo de personas que viajaban en vehículos ATV esa noche”.

“Esa misma noche, el oficial asesinado llamó por radio que las personas dentro del grupo de motociclistas estaban disparando contra los autos”, indica la moción. “Isaac dijo a los agentes de HSI que escuchó disparos mientras viajaba e hizo un gesto a sus compañeros de viaje en referencia al tiroteo”.

“Admitió además que se encontraba en Sabana Abajo cuando escuchó disparos, los cuales corresponden a los disparos que le quitaron la vida al oficial asesinado. Cerca de esa escena, los agentes encontraron el arma reglamentaria del oficial, y cerca de ella encontraron las bolsas en la imagen de arriba”, abundó la moción, firmada por el fiscal Vance Eaton, quien incluyó algunas fotos extraídas de los teléfonos de los imputados.

Posteriormente, el fiscal federal recalcó que en ese momento no tenían ninguna evidencia contra Isaac Sánchez ni los cuatro coacusados en relación al asesinato de Ramos Vélez.

Casi nueves después, el gran jurado emitió el pliego acusatorio que se revela hoy. Eaton es uno de los tres fiscales que figuran en la presentación del caso que resultó en el pliego acusatorio que dio paso al operativo de este miércoles.

En el cargo nueve, el nuevo pliego imputa por el asesinato del policía a Pérez Fernández, Isaac Sánchez, González Sáez, Consepción Tapia y López Vega. El cargo alega que como parte del delito de narcotráfico estos acusados “causaron la muerte de E.R.V. a través del uso de un arma de fuego”.