El actor y sobreviviente de cáncer dice que tiene más energía desde que integró esta terapia de BioTE Medical
En la escena de la vida, Braulio Castillo aprendió la importancia de vivir cada momento al máximo y mantener hábitos saludables cuando, a sus 52 años, le tocó librar una batalla contra el cáncer de próstata.
Tras una década sin padecer la enfermedad, el actor abraza un nuevo estilo de vida que le permite disfrutar su carrera a plenitud. El tratamiento de reemplazo hormonal en forma de pellets, ofrecido por BioTE Medical, le brinda la energía que necesita para cumplir con sus proyectos.
“Mis días comienzan bien temprano. Tengo que cargar con energías porque son muchas las cosas que debo realizar. Gran parte de esas energías y del estado de salud que mantengo se las debo a la terapia de reemplazo hormonal”, aseguró Castillo.
Hace unos años, notó que, a pesar de ir al gimnasio, no obtenía los resultados que deseaba. Por tal razón, buscó información sobre el tratamiento de reemplazo hormonal, un método que utiliza hormonas bioidénticas extraídas de plantas. Estos pellets contienen hormonas similares a las que producen las personas y son comprimidos en un laboratorio.
El artista encontró los múltiples beneficios del procedimiento en los adultos, a quienes les permite balancear sus niveles de hormonas. Las hormonas se encargan de regular la reproducción, el metabolismo, el crecimiento y el desarrollo de las personas, quienes a partir de los 30 años experimentan un declive en la producción de hormonas, explicó el doctor Gary Donovitz, fundador de BioTe Medical.
La disminución en la producción del estrógeno en las mujeres y de la testosterona en los hombres afecta el metabolismo, la energía, la función sexual, el estado de
ánimo y la salud en general, afirmó Donovitz. Según el experto, este tratamiento busca optimizar la salud de las personas.
Asimismo, explicó que los pellets se colocan debajo de la piel y que, en la mayoría de los casos, se localizan en el área de la cadera debido a la cantidad de masa corporal que se acumula allí. Estas hormonas bioequivalentes se insertan cada cuatro o cinco meses, aunque las personas pueden mantenerse el tratamiento hasta que crean pertinente.
“Primero hacemos un cuestionario de evaluación de la salud que nos permite saber los síntomas que tienen los pacientes. A partir de eso, evaluamos sus exámenes de laboratorio para ver qué hormonas no están en equilibrio. Una vez culminemos el proceso, optimizamos las hormonas de cada persona”, sostuvo Donovitz.
En Puerto Rico, BioTE Medical cuenta con casi una década de trayectoria y dispone de unos 200 proveedores, como el médico de Castillo, el doctor José Álvarez Romagosa.
“Este tratamiento es supervisado de una manera correcta. Yo he podido ver los resultados en mi diario vivir y en mi calidad de vida. Me ha beneficiado enormemente”, puntualizó el actor.
Para más información sobre el tratamiento, puede visitar www.biotemedical.com.
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