La gobernadora Jenniffer González coordina la colocación de una estatua en homenaje a Donald Trump frente al Capitolio en San Juan, proceso que la Legislatura de Puerto Rico ha frenado desde su primera administración presidencial.

“Estamos coordinando eso…No sabemos cuándo se hará, pero él se lo merece”, dijo González, al indicar a la sección de Playbook de la publicación Politico que ella ganó la gobernación en una papeleta electoral “pro Trump”.

Barack Obama es, entre los presidentes de Estados Unidos que han visitado a Puerto Rico, el último en tener una estatua en el del Paseo de los Presidentes frente al Capitolio.

Tras las controversias entre Puerto Rico y el presidente Trump durante la emergencia del huracán María, el entonces y actual presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, dijo en 2018 que no había dinero para mandar a hacer la estatua de Trump y que no veía con buenos ojos al gobernante estadounidense.

“No simpatizo tampoco mucho con Trump, y no creo que haya mucho puertorriqueño que simpatice con él, pero hay una ley (orden administrativa) que exige que todo presidente que haya visitado Puerto Rico se le reconozca de esa manera, pero no está en planes ahora mismo”, indicó entonces Rivera Schatz, según un reportaje de Primera Hora.

La Legislatura de Puerto Rico tiene aún que ordenar, además, la estatua para Joe Biden, quien visitó la isla como presidente en octubre de 2022, después del huracán Fiona.

La gobernadora González, quien quiere ser el “eslabón” de Puerto Rico con Trump, llegó a la capital estadounidense el pasado viernes para participar en eventos relacionados a la toma de posesión del presidente 47 de Estados Unidos.

La gobernadora, quien fue comisionada residente en Washington del 2017 al 2024, no respaldó a Trump como candidato presidencial en 2016. Pero, le apoyó en 2020, aunque le retiró su respaldo después de considerar que incitó a la insurrección contra el Congreso el 6 de enero de 2021.

De cara a las elecciones de 2024, volvió a apoyarlo.

La gobernadora dijo que ella ganó en noviembre pasado como candidata pro Trump y a pesar del coraje que generó el comediante Tony Hinchcliffe por describir a Puerto Rico como una “isla flotante de basura” durante un evento de campaña del ahora presidente en Nueva York.

González condenó esas expresiones de Hinchcliffe, de las cuales el entonces candidato presidencial republicano se distanció.

González, mientras, prefiere ver la respuesta latina a esa controversia en el voto a favor de Trump de los electores de Florida. En Puerto Rico, Trump solo obtuvo un 26% de los votos frente a la entonces vicepresidenta y candidata presidencial demócrata Kamala Harris en una papeleta simbólica presidencial.

Las encuestas confirmaron, además, que la candidata presidencial demócrata dominó el voto de la diáspora boricua en Estados Unidos.

Por otro lado, la gobernadora González, presidenta del Partido Nuevo Progresista (PNP) y defensora de la estadidad para Puerto Rico – alternativa de status que Trump rechaza-, dijo a Playbook que buscará copiar iniciativas económicas del gobernador de Florida, el también republicano Ron DeSantis.