El demócrata Tim Walz y el republicano JD Vance, los candidatos a la vicepresidencia por los dos principales partidos estadounidenses, tendrán el martes en la noche su primer y único debate, a cinco semanas de las elecciones presidenciales y legislativas.

El encuentro, auspiciado por la cadena CBS, subirá a escena a las 9:00 p.m. en los estudios de la empresa en Nueva York y se extenderá por 90 minutos, en momentos en que las encuestas aun pronostican una cerrada contienda entre la vicepresidencia Kamala Harris y el expresidente Donald Trump.

Según los promedios de encuestas que calculan Real Clear Politics y FiveThirtyEight, Harris, candidata demócrata a la Casa Blanca, y el Trump, el candidato republicano, están muy nivelados tanto a nivel nacional como en los siete estados que se considera pueden decidir las presidenciales del 5 de noviembre.

La ventaja de Harris a nivel nacional es de solo 2.8% y 2%, según los estimados de FiveThirtyEight y Real Clear Politics, respectivamente. En Pensilvania, el más importante entre los estados péndulos, el promedio de encuestas de Real Clear Politics solo les separan por 0.2% (a favor de Trump), pero el análisis de FiveThirtyEight tiene a Harris con 1% al frente.

La directora y ancla del informativo nacional de CBS, Nora O’Donnell y la moderadora del programa dominical Face the Nation y jefa de los corresponsales para asuntos exteriores, Margaret Brennan, tendrán a su cargo las preguntas.

Como en el debate de junio pasado entre Trump y el presidente Joe Biden, y contrario al cara a cara entre el expresidente y la vicepresidenta Harris, las periodistas no harán verificación de datos durante el programa, según informes.

Pese a que llevan semanas de campaña, dos meses y medio en el caso de Vance, para muchos electores el debate del martes puede ser la primera vez que se sienten a escucharles con detenimiento.

Walz, quien fue congresista, maestro y guardia nacional, ha sido promovido como un hombre formado en una zona rural de Nebraska, liberal en temas sociales, pero en sintonía con costumbres de localidades conservadoras.

“Nací en West Point, Nebraska y viví en Butte, un pequeño pueblo de 400 habitantes donde la comunidad era una forma de vida. Mientras crecía, pasaba los veranos trabajando en la granja familiar. Mi mamá y mi papá nos enseñaron a mostrar generosidad hacia nuestros hijos, hacia nuestros vecinos y trabajar por el bien común”, agregó el gobernador Walz cuando la vicepresidenta Harris le presentó como candidato a número dos del gobierno de Estados Unidos..

Poco después de ser escogido por Harris como compañero de papeleta, Walz se enfrentó a críticas por haber dado a entender que estuvo en la zona de guerra durante sus dos décadas en la Guardia Nacional de Minnesota, cuando la realidad es que fue movilizado – al inicio de la guerra de Afganistán-, a ofrecer seguridad en Italia.

Tras ser seleccionado por Trump como su compañero de boleta electoral, Vance – graduado de la Escuela de Derecho de la Universidad de Yale-, ha sido recibido por el movimiento MAGA como potencial heredero de Trump.

Lleva solo 22 meses como senador por Ohio, tras una carrera en la industria tecnológica. Aunque se opuso con fuerza a Trump en 2016 y dudó de su éxito como presidente, ha estado del lado del expresidente desde las elecciones de 2020.

Pero, ha estado marcado por controversias después de cuestionar los intereses de las mujeres sin hijos que tienen gatos y luego dar vida a la mentira de que inmigrantes haitianos estaban comiéndose los perros y gatos mascotas de los vecinos de la localidad de Springfield, Ohio.

A Walz lo ha ayudado a prepararse el secretario de Transportación y ex precandidato presidencial, Pete Buttigieg.

Tom Emmer, número tres de la mayoría republicana y electo por un distrito de Minnesota, ha asistido a Vance.

Los candidatos a la vicepresidencia tendrán dos minutos para contestar las preguntas de las moderadoras. Luego tendrán un minuto para refutar y pueden aspirar a otro minuto para una segunda respuesta a su oponente, si las moderadoras lo conceden.

No podrán llevar notas escritas, pero tendrán una libreta para hacer apuntes.