La victoria del martes de los líderes de la NBA, Cavaliers de Cleveland, colocó su registro en 34-5, muy cerca del ritmo ganador que tuvieron los Warriors de Golden State en la temporada que impusieron el récord vigente en la NBA de más triunfos en una campaña.

De hecho, si se eliminan los últimos tres juegos de Cleveland, hace una semana, los Cavaliers sumaban 36 partidos con récord de 32-4, lo que les daba una proporción ganadora de 8-1, o en otras palabras, ocho victorias en cada nueve juegos.

Fue exactamente la frecuencia con la que ganaron los Warriors de 2015-16, cuando impusieron el nuevo récord de la NBA con 73-9.

La diferencia, todavía sigue estando a favor de los Warriors de esa temporada pues en sus primeros 39 encuentros, su ritmo victorioso fue mucho más avasallador, cuando jugaron para 36-3, mientras los Cavaliers de este año tienen dos victorias menos y dos derrotas más.

Ese récord de Golden State de 36-3 en los primeros 39 partidos de 2015-16, se traduce a razón de 12 victorias por cada derrota, el que lógicamente no mantuvo por el resto de esa temporada.

Aun así el ritmo de Cleveland es prometedor, cuando resta poco más de la mitad de los juegos en lo que queda de temporada regular, unos 43 para ser exactos.

Cleveland no vio acción el miércoles y vuelve a cancha este jueves para enfrentar a las 8:30 p.m. al Thunder de Oklahoma City, líder de su Conferencia del Oeste y el segundo mejor equipo de toda la liga, superado solo por los Cavaliers.

Oklahoma está jugando para 33-6, apenas un juego de diferencia de Cleveland.

Lo que sí parece seguro es que los Cavaliers superarán las 60 victorias si continúan con su ritmo ganador, con oportunidad de imitar quizás a los propios Warriors, que una temporada antes de su récord de 73 triunfos, jugaron para 67-15 en 2014-15. Ese mismo registro lo repitieron en 2016-17.

Posterior a esas demostraciones de los Warriors, la mejor actuación de un equipo ha sido la que tuvieron los Rockets de Houston en 2017-18, cuando jugaron para 65-17. Los Suns de Phoenix tuvieron 64-18 en 2021-22, y los Celtics de Boston jugaron para el mismo récord el año pasado, antes de ganar el campeonato de la NBA.

Con su marca de 34-5, los Cavaliers comandan la lucha en la Conferencia del Este con una ventaja de 6.5 juegos, precisamente sobre los Celtics (28-12), que con la misma cantidad de partidos celebrados el año pasado cerca de esta fecha, tenían 31-9.

En 2015-16, cuando los Warriors de Stephen Curry, Klay Thompson (ahora con Dallas) y Draymond Green impusieron el récord de 73-9, quebraron la marca anterior de 72-10 que poseían desde la temporada 1995-1996 los Bulls de Chicago, en la era de Michael Jordan y Scottie Pippen. Pasaron 20 temporadas exactas antes de que el récord de los Bulls quedara en el olvido.

Está por verse si los Cavaliers pueden mejorar su ritmo ganador en la segunda mitad de campaña y borrar el récord vigente de Golden State, apenas nueve temporadas luego.

Donovan Mitchell, que viene de anotar 35 puntos el martes en la victoria 127-117 de Cleveland sobre los Pacers de Indiana, ha llevado la voz cantante en el ataque de los Cavs, pues al momento se mantiene como su mejor anotador con promedio de 23.1 puntos por juego en 37 apariciones.

Otros cinco canasteros de Cleveland también están promediando puntos en dígitos dobles, como el armador Darius Garland, que es el segundo mejor encestador del club con 21.0.

En el plano individual, Cleveland no tiene a ninguno de sus canasteros entre los mejores cinco de la liga en los principales renglones ofensivos o defensivos, pero en el colectivo la historia es distinta.

Por ejemplo, los Cavaliers son el segundo equipo que más anota con un promedio de 122.3 puntos por juego, muy cerca de los líderes Grizzlies de Memphis, cuya media es de 123.

Pero, Cleveland es el equipo que mejor está tirando en toda la NBA con un 50.2% en sus intentos de campo.

Como si fuera poco, el margen de sus victorias es el segundo mejor en todo el circuito. En promedio, los triunfos de Cleveland se han dado por una diferencia de 10.8 puntos por partido, solo superada por la de 12.8 de Oklahoma City.

Aunque Boston sigue siendo el que más canastos de tres puntos encesta por partido, con una media de 17.9, Cleveland le sigue empatado con Chicago con un promedio de 16.2.

Pero el porcentaje de efectividad en los intentos de triple de los Cavaliers es el mejor de la NBA con un 39.9%.

En las asistencias son el quinto mejor equipo con promedio de 29.1 por partido hasta la fecha.