Cuando el jardinero de Grandes Ligas Nelson Velázquez se unió a las filas de los Criollos de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC) para la temporada 2024-25, la novena cagüeña poseía foja negativa de cinco victorias y 15 derrotas, cinco de ellas al hilo.

Sin embargo, tan pronto Velázquez comenzó a tener acción con la escuadra criolla, el equipo tomó otro rumbo. En los primeros ocho partidos disputados con el uniforme criollo, antes de la acción del pasado fin de semana, Caguas registró marca positiva de 7-1. Y en total, con los cuatro partidos adicionales celebrados entre el sábado y el lunes, los Criollos juegan para 9-3 con el patrullero en su alineación, saliendo del sótano en la tabla de posiciones de la liga.

Velázquez no asume la responsabilidad del giro beneficioso, pero asegura que busca aportar al equipo, no solo en el terreno, sino en el camerino con palabras de motivación, como un veterano en el béisbol.

“Intento en el día a día (ayudar) no tan solo en el terreno de juego, sino desde que llego al clubhouse. Es tratar de motivar a los muchachos para que cada vez que salgamos al terreno, demos lo mejor y tratemos de distraer la mente. Creo que son cositas básicas que a lo mejor anteriormente, cuando empezó la temporada, no las estaban haciendo”, sostuvo Velázquez a El Nuevo Día desde el Estadio Hiram Bithorn de San Juan.

Para Velázquez, la ejecución de los Criollos en el terreno, previo a su llegada, y a la del también guardabosque Orlando Martínez, recayó en la debilidad mental. “El único cambio es la motivación. A veces los equipos, cuando están perdiendo, se rinden y creo que lo más importante es mantener la fe en que las cosas van a salir y creo que el trabajo que hemos puesto como equipo ha sido la clave para tener estas victorias que tenemos hasta el momento”, dijo el jugador.

Además del aspecto mental, el jardinero, que promedia .333 al conectar siete imparables, un jonrón, impulsar siete carreras y recibir 11 boletos gratis, reconoció que otra fortaleza en esta segunda mitad de temporada ha sido la fusión entre el talento joven y el de los veteranos como él.

“Es una etapa que yo pasé y para mí es un placer enseñarles cositas que a lo mejor ellos no saben”, dijo.

Con su rol claro, Velázquez procurará regalarle a Caguas, máximos campeones de la LBPRC, su cetro número 22.

Tras la acción del fin de semana, incluyendo el doble juego contra Ponce el lunes, los Criollos salieron del sótano y ascendieron una posición, hasta la quinta, acercándose a un solo juego del cuarto y último lugar clasificatorio, que ocupan precisamente los Leones. Caguas tiene ahora récord de 14-18.

Para la concluida campaña en las Mayores, Velázquez inició con los Ohama Storm Chaseres, filial Triple A de los Royals de Kansas City.

Luego de una ejecución en la que promedió .239 con el madero, los Royals volvieron a subirlo a la ‘Gran Carpa’.

En 64 juegos en las Mayores en el 2024 bateó .220 con 41 imparables, ocho cuadrangulares, 31 carreras y otras 27 remolcadas.

“Sigo con los Royals. Tienen planes conmigo, así que son buenas noticias. Muchas cosas pueden pasar. Vamos a tener buenos días. Vamos a tener malos días, creo que simplemente hay que tener fe”, manifestó Velázquez, que se reportará el próximo año a los entrenamientos de primavera en el Surprise Stadium de Arizona.