Guaynabo - Henry “Moncho” Lebrón y Christopher “Pitufo” Díaz tenían previsto medirse el 13 de julio en Filadelfia, pero una lesión de Lebrón en una de sus manos provocó un cambio de contrincante para el barranquiteño.

Cinco meses después, la pelea se hará realidad este 7 de diciembre en el Coliseo Roberto Clemente, de San Juan, como parte de la cartelera protagonizada por el campeón superligero de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), el australiano Liam Paro, y su retador, el estadounidense Richardson Hitchins.

Para Lebrón, que no sube a un ensogado desde el 4 de noviembre de 2023, será una oportunidad para demostrar que está en condiciones óptimas y para encarrilar carrera. Díaz -por su parte- ha peleado dos veces en el 2024 y en ambas ha ganado por nocaut.

“A pesar de estar un año inactivo, me mantuve todo el tiempo entrenando y haciendo los guanteos necesarios. No estoy fuera de forma y no tengo ningún problema”, expresó Lebrón en entrevista con El Nuevo Día durante un entrenamiento público realizado en el gimnasio Wilfredo Gómez.

El aguadillano recordó que antes de la pelea de julio, iba a medirse ante el filipino Charly Suárez el 13 de abril en 13 in Corpus Christi, Texas, por una eliminatoria por título mundial en la división superpluma (130 libras). Sin embargo, el encuentro no se pudo luego que el equipo de Lebrón y la compañía Top Rank, quien lo representaba en ese momento, no pudieran llegar a un acuerdo para extender el contrato que habían firmado.

El atleta está ahora con Matchroom Boxing, quien es la compañía -junto a Universal Promotions- que presentan el programa Paro-Hitchins.

“Yo tenía dos peleas pautadas, pero una se me cayó por negocios y la otra por lesión”, agregó el púgil, cuya última aparición boxística fue ante el estadounidense William Foster III, a quién venció por decisión mayoritaria.

Su próximo compromiso será por los títulos superpluma Continental de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y Latino de la Federación Internacional de Boxeo (FIB).

“Me siento bien, cómodo. Hice el campamento entrenamiento completo aquí en la isla. Llevo tiempo preparándome física y mentalmente, y de verdad que estoy bien”, insistió el atleta, que posee inmaculada de 19-0, con 10 nocauts.

Al describir a Díaz (29-4, 19 KO’s), lo catalogó como “un boxeador aguerrido” y que “asimila golpes”.

“Es un boxeador fuerte. Lo conocemos desde muchos años y no ha cambiado mucho, siempre se ha mantenido con la misma tendencia y yo creo que ese sábado no va a ser nada diferente tampoco”.

¿Entiendes que llegarán a la distancia de 10 asaltos o que habrá un nocaut?, se le preguntó.

“Dependiendo de cómo se desenvuelva la pelea, si llega el nocaut llega. Pero si no, a la distancia. Vamos a estar listos para lo que venga”, puntualizó el atleta.