Carolina - Ayden Owens-Delerme no se ha puesto unos ganchos ni ha corrido en una pista desde su participación en los Juegos Olímpicos en París 2024 el pasado verano.

El decatleta boricua todavía está lidiando con las lesiones que lo limitaron durante su participación en la justa olímpica en la capital francesa, donde terminó en la novena posición del decatlón.

Las lastimaduras no le ha permitido comenzar a entrenar con su nuevo mentor, Petros Kyprianou, en la Universidad de Illinois luego de tener este año su campamento en San Germán con el coach Lawrence “LoJo” Johnson.

“Todavía estoy bregando con mi ingle, la hernia y todo eso. No he comenzado a entrenar todavía. Poco a poco, estamos haciendo rehabilitación inyecciones y otras cosas a ver si podemos regresar a la pista y entrenar”, dijo Owens-Delerme durante la 58va Premiación Olímpica del Comité Olímpico de Puerto Rico en un hotel en Isla Verde.

El atleta continúa bajo tratamiento de plasma (PRP por sus siglas en inglés), terapia que utiliza la propia sangre del paciente para estimular la curación y reducir el dolor.

“Me iban a operar hace un mes pero decidí que no. No quería tener ese tiempo fuera. Fue un riesgo. Con la cirugías hay riesgo y yo no lo quería tomar. Decidí hacer inyecciones PRP en el área y me está ayudando”, indicó Owens-Delerme.

“Tuve un PRP hace tres mes y una más el mes pasado. Está última me ayuda un poco más que la anterior. Si me arregla podemos empezar en el año nuevo. Será un poco difícil hacer la temporada bajo techo”, agregó.

Debido al escenario, se perderá el Campeonato Mundial de Atletismo en Pista Cubierta que se celebrará en China en marzo. Así que Owens-Dulorme tiene como objetivo el Mundial de Atletismo (pistas abiertas) el próximo septiembre en Tokio, Japón.

“Soy atleta. Quiero volver. No voy a decir mucho por mi situación pero es volver y estar listo para el campeonato mundial”, destacó.

Aunque aún no ha podido entrenar con Kyprianou, Owens-Delerme ya comenzó a adaptarse al campus universitario junto a atletas de la División 1 de la NCAA.

“Todo va bien con el coach nuevo. Estoy en buenas manos. Me siento cómodo. Es bueno que estoy en ese ambiente de de División 1 de NCAA con otros atletas. Tenemos un grupo de decalistas que el año pasado no tenía. Ahora puedo entrenar con cuatro o cinco de alto nivel. Tengo un buen ambiente para entrenar en mi evento”, apuntó sobre la diferencia de entrenar en la isla.

“Es diferente. Con nuestras instalaciones bajo techo, son 200 metros lisos. Eso es diferente que San Germán, donde hay sol, calor, el “calentón”. Extraño este ambiente también pero, para mí, me tuve que ir y entrenar con un grupo y coach nuevo. Todo tiene sus pro y contras”, comparó.

En el programa de Illinois, Owens-Delerme trabajo junto el cuerpo técnico de Kyprianou en el reclutamiento de atletas.

Esta semana en la isla, Owens-Delerme realizó unas clínicas en Mayagüez junto a 60 atletas.