Río Grande - El Puerto Rico Open concluyó el domingo con un nuevo campeón, que a su vez implantó un récord con la mejor puntuación total que ha registrado golfista alguno en las 17 ediciones de la competencia.

Y aunque no contó con una de las caras más conocidas, el puertorriqueño Rafael “Rafa” Campos, el director ejecutivo del torneo, Matt Truax, afirmó que la justa cumplió con las expectativas en términos deportivos y de asistencia.

“La contestación a esa pregunta es sí”, declaró Truax ante preguntas de El Nuevo Día.

“Hemos hecho muchos cambios, pero todo lo que pasó en este lado del campo, con la vista de El Yunque, fue increíble. Las carpas, la experiencia para el público, la entrada... todo fue magnífico. Hay cosas que obviamente hemos aprendido. Pero tenemos una buena base para el futuro”, agregó el directivo.

Para el recién concluido certamen, se realizaron cambios en la configuración del campo y de los espacios y carpas para el público.

En el caso del terreno de golf, se invirtieron los hoyos, para que desde el número 18 se pudiera apreciar El Yunque. De igual forma, la entrada y el área donde estaban los auspiciadores y concesionarios fueron ubicadas más cerca a la casa club, lo que evitó el desparramamiento de zonas de los eventos anteriores.

La competencia nacional cerró con el novato australiano Karl Vilips como el ganador con una tarjeta total de 262 golpes, 26 bajo par. Esta anotación superó la marca anterior que tenían el estadounidense Chesson Hadley en 2014 y el colombiano Nico Echavarría en 2023, quienes ganaron el Puerto Rico Open con 267 toques, 21 bajo par.

Asimismo, el estadounidense Kevin Roy registró la mejor arrancada de cualquier jugador en la historia del Puerto Rico Open con tarjeta de 62 golpes, 10 bajo par.

Mientras, Campos no compitió en Río Grande debido a que estuvo activo en el Invitacional Arnold Palmer, en Orlando, Florida, este mismo fin de semana. El sanjuanero cerró con tarjeta de 156 golpes, 12 por encima del límite, al cierre de los primeros dos días de competencia, por lo que quedó eliminado.

Aunque al momento de la entrevista no tenía a mano los datos sobre la asistencia, Truax sostuvo que su percepción era que habían llegado más personas que el pasado año. El ejecutivo se comprometió a enviar los datos cuando los tuviera.

En cuanto a la ausencia de Campos, reconoció que hizo falta. De igual manera, reconoció el trabajo de los cuatro puertorriqueños que estuvieron presentes: Chris Nido, Gustavo Rangel, Kelvin Hernández y Reinaldo Simoni, quienes no hicieran el corte del viernes.

Nido cerró con tarjeta de 141 toques, tres bajo par. Hernández y Simoni, que son aficionados, se despidieron con par total de 144. Rangel -quien también es aficionado- jugó para 147 toques, tres sobre par.

“Reinaldo, Gustavo, Chris y Kelvin son estrellas. Tienen personalidades superdinámicas. Son el futuro del golf en Puerto Rico”, dijo Truax.

El director ejecutivo sostuvo que en las próximas semanas se sentarán para analizar lo acontecido. Añadió que también falta hacer un análisis económico del evento, aunque entiende que los “resultados van a ser un poco mejores que el año pasado”.