La ruta panorámica en Cayey alberga uno de los invernaderos más curiosos en la isla, donde se cultivan unas mil variedades de plantas carnívoras y de colección.

Se trata de Jurassic Plants PR, un espacio creado por el biólogo guayanillense Daniel Cruz Smith quien, desde hace 11 años, se dedica a sembrar este tipo de flora que se nutre de la captura y consumo de pequeños animales, especialmente insectos.

Su enamoramiento con estas plantas -para algunos lúgubres y para otros una belleza poco común- surgió mientras estudiaba su bachillerato en la Universidad de Puerto Rico en la ‘Ciudad de las Brumas’, cuando descubrió un pasatiempo que se convirtió en pasión.

“Yo siempre fui muy apasionado con la naturaleza y con el cultivo de plantas. Antes cuando estaba en la universidad, me dedicaba a hacer huertos comunitarios, pero cuando descubrí las plantas carnívoras, literalmente, me obsesioné. Fue cuando compré mi primera ‘venus flytrap’ o venus atrapamoscas”, relató el biólogo de 31 años.

“Me pareció tan fascinante cómo una planta tiene la capacidad de ser un depredador y capturar y digerir los animales; les da una personalidad bien interesante. Aunque el mundo de las plantas carnívoras es bien diverso, hay más de 800 especies conocidas y miles de híbridos”, reveló.

Igualmente, destacó que en Puerto Rico hay unas seis especies de plantas carnívoras nativas “aunque de un tamaño pequeño y difíciles de conseguir en su hábitat”.

“Una de estas es la drosera capillaris, que es una de las que tiene pegamento en la superficie de la hoja. Además, tenemos cinco especies de utricularia que son plantas carnívoras con trampas subterráneas y se alimentan de microorganismos en el suelo”, subrayó.

Su colección, según Cruz Smith, tiene más de mil especies de plantas, en su gran mayoría carnívoras, “aunque también tengo otras familias como son orquídeas, bromelias, suculentas y aroides”.

“Además de la ‘venus flytrap’, otras plantas carnívoras que son bien populares son las plantas droseras que tienen pegamento en la superficie de sus hojas y los insectos se quedan adheridos, principalmente, insectos pequeños como hormigas y mosquitos”, explicó.

“También las plantas cántaro son bien populares porque hay muchas especies; esas vienen siendo los nepentes y las sarracenias. Otras que son menos conocidas como la pinguícula, utricularia, heliamphora y muchos otros géneros como incluso, bromelias carnívoras de las que solamente existen tres especies”, detalló.

Su invernadero, especializado en el cultivo de plantas carnívoras y plantas de colección, abrió en 2020 y brinda empleo a tres personas.

Entre las preferidas de la clientela están “las plantitas de cántaro porque capturan muchos insectos que son perjudiciales para nosotros, como los mosquitos, las moscas, las hormigas y los mimes”.

No obstante, confesó que sus plantas preferidas “son las nepentes porque son las plantas carnívoras más evolucionadas, son las que tienen la capacidad de capturar los animalitos más grandes. Algunas especies pueden comer animales tan grandes como una rata”.

“(Las nepentes) también son las que tienen relaciones simbióticas más complejas con los animales porque las plantas carnívoras, no solamente se alimentan de algunos animales, sino que también son el hogar de algunos otros”, manifestó el especialista en biología que vive en Cayey hace unos 14 años.

“Algunas plantas tienen relaciones simbióticas con hormigas u otros pequeños animales que le dan protección a la planta, mientras la planta le da un hogar donde vivir. Así que, esas relaciones simbióticas las hacen bien interesantes, además de que son plantas altamente evolucionadas y especializadas”, insistió.

De otra parte, admitió que la aceptación de estas plantas ha ido en crecimiento. Por eso se ha dedicado a educar a las personas sobre los mitos existentes en cuanto a esta flora.

“Algunos de los mitos más comunes, es que son difíciles de cultivar o que generan algún tipo de mal olor o que son tóxicas para las mascotas y todas esas cosas no son ciertas. Ellas son inofensivas, tanto para las mascotas y para los niños”, aseguró durante su participación en el Festival de las Flores en Aibonito.

Asimismo, apuntó a que la mayor parte de su clientela son personas jóvenes apasionadas con la naturaleza y otras que estudian alguna profesión relacionada a la ciencia. No obstante, “eso no significa que no haya de otros sectores de la comunidad porque tengo clientes de todo tipo, personas mayores también”.

“Muchas personas compran su primera planta carnívora pensando que es un buen control de plagas. Aunque es cierto que ellas devoran gran cantidad de insectos que son perjudiciales para nosotros, pero no significa que sean un control de plagas que erradique todos los insectos porque ellas no destruyen a sus presas, sino que controlan las poblaciones”, aclaró.

Entretanto, destacó que el clima tropical favorece el cultivo de las plantas carnívoras.

“La regla universal para muchas de ellas es que no las debemos fertilizar. Se llaman carnívoras porque se alimentan y derivan la mayoría de sus nutrientes de los animalitos que capturan. Por esa razón, no las fertilizamos. Lo demás es luz y agua, algunas prefieren más luz que otras y hay que mantenerlas bastante hidratadas”, esbozó.

Para detalles jurassicplantspr.com o el 939-630-4269.

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