Han pasado 367 días desde que Sinéad O’Connor murió, luego de que fuera encontrada sin vida en su departamento de Londres. A raíz de su deceso se llegó a sugerir que se había tratado de un suicidio, pues la cantante seguía enfrentando el duelo por la partida de su hijo, Shane Lunny, quien se quitó la vida año y medio ante. Esas versiones fueron descartadas cuando las autoridades forenses aclararon que se habían tratado de causas naturales y, ahora, se da a conocer el motivo exacto.