Dorado - Cuando Norberto Vélez comenzó con sus “Sesiones desde la loma”, lo hizo, al principio, “para curarse”. Se trataba de un hobby en el que él y amigos músicos se juntaban para formar un vacilón bien chévere cuyo ingrediente principal era la salsa. Cuando subieron la primera sesión a YouTube, no tenían mayores intenciones que compartir su buen rato y su buena música con el resto del mundo. Jamás pensaron que, con cada sesión que compartían, su pequeña loma se transformaría en un verdadero fenómeno.

Con miles de seguidores en su canal, y millones de reproducciones en muchos de sus videos, el proyecto ha cobrado vida propia. Ha compartido micrófono con algunos de los artistas más importantes de la historia de la salsa, pero también ha sido consciente de abrirle el espacio a nuevas voces hambrientas por dejar su marca en el mundo y continuar el legado de uno de los géneros musicales más distintivos que han salido desde Puerto Rico. De cierto modo, de eso se trata su trabajo.

Esta tarde, la icónica loma se ha trasladado al Parque Agroturístico de Dorado, donde celebrarán los cinco años desde el inicio del proyecto con “Sesiones desde la loma: el evento 3″.

Mientras se mueve frenéticamente de lado a lado por el “backstage” de la tarima de su evento más reciente, no cabe duda de que Norberto, o “Norbert”, como le llama todo el mundo, se ha convertido en una auténtica estrella. En cada esquina, fanáticos de Puerto Rico y de otros países gritan su nombre, buscando tomarse alguna foto o compartir brevemente con el artista para compartir cómo su proyecto ha tocado sus vidas.

“Empezó como un hobby y ya es una responsabilidad que sentimos de seguir haciendo música, trayendo talentos nuevos para que la gente vea, y darle vigencia a cantantes que a lo mejor estaban fuera de la luz. Hemos recibido el cariño, la gente nos apoya, nos escribe, nos ve y nos comparte. Es una responsabilidad bien grande, pero lo hacemos con mucho cariño”, explica el cantante.

¿Qué hace que su proyecto sea tan querido? Para Norberto, el secreto está en una cosa: su autenticidad.

“’Desde la loma’ es una cosa muy orgánica, es algo natural. Aquí no hay mucho planificado, simplemente somos lo que somos nosotros como personas y como músicos todos los días. Así me comunico con los artistas y así me comunico con mis muchachos. Esa forma tan orgánica yo creo que hace que la gente se sienta que forman parte de esto que hacemos. Mi vida ha cambiado demasiado. He crecido en muchos ámbitos. Han sido cinco años que parecen 20″, reconoce.

Mientras habla, muchas personas llaman su nombre o se acercan para saludarlo. De su cara nunca se borra una sonrisa que sirve como la primera impresión para todos sus fanáticos. Antes de regresar a los quehaceres de su ocupado día, Norberto se acerca hasta una de las barandas en la que un grupo de personas que han viajado desde Perú ansían compartir un momento con él. Cuando llega, toma la bandera peruana que han traído con ellos y posa para fotos. El intercambio es breve, pero la alegría de quienes han llegado aquí desde otra parte del mundo para disfrutar de su música es palpable y hasta contagiosa.

“Desde que empezamos esto se ha dado como un intercambio de ideas y cosas bonitas. Para nosotros es un honor y un placer. No tengo más que decirle a la gente que gracias”, dice, antes de regresar a trabajar.

A lo largo del día, el equipo de producción espera la llegada de cerca de 5,000 personas. Entre ellos está Rafael Rodríguez Santiago. Rafael se considera así mismo un salsero de la mata, y tiene los números para apoyarlo: de las 40 ediciones que se han celebrado del Día Nacional de la Zalsa, ha ido a 36. Piensa que eventos como este ayudan a respirar nueva vida a esa música que alimentó sus oídos y su espíritu en sus años de juventud.

“Es bien impactante ver un cantante joven con estas virtudes y buscar mantener unido a lo que es el pueblo que le gusta la salsa y la buena música. Este tipo de actividad ayuda a reunirnos para poder disfrutar. La salsa sigue evolucionando. Mientras los viejos estén, se mantiene la salsa, y los nuevos van a seguirla evolucionando y llevándola a nuevos niveles. Siempre se va a mantener”, comparte.

De igual forma, Ioanis Torres y Ramón Pérez piensan que Norberto y su equipo están haciendo un trabajo importante para cerrar la brecha entre generaciones de salseros y proveer espacios, desde lo digital y lo físico, en los que todo el mundo pueda compartir.

“Norberto corre todas las bases. Hace falta más gente como él que promueva la salsa. Su plataforma ha crecido tanto que mis hijos, que son treintones, lo conocen a través de YouTube y lo siguen. Yo creo que él es bien importante para las nuevas generaciones”, dice Ioanis.

“Él también le da oportunidad a voces nuevas, a esa juventud de la salsa, para que se integren a este son de nosotros que no va a morir nunca”, opina, por su parte, Ramón.

Una de esas nuevas voces es la cantante peruana Brunella Torpoco, quien se presentó por primera vez en Puerto Rico, en este evento, junto a Manolito Rodríguez y su conjunto. Para la salsera, la oportunidad representa la posibilidad de crecimiento y de obtener mayor presencia, haciendo lo que ama y ha amado desde que era una niña.

“Soy salsera de nacimiento. La familia, el barrio, la gente siempre bailando y gozando, disfrutando de la salsa. Lo viví desde muy pequeña. Hay que revivir la música, ya sea volviendo a recordar temas del pasado o evolucionándolos. Hay, también, nuevos talentos que se están esforzando para tratar de mantener la música viva para que dure mucho más. Hay muchas mujeres artistas en mi Perú, también en Colombia y otros países de Latinoamérica, que la están rompiendo ahorita. Espero que a este tipo de eventos vengan muchas más. La cosa es seguir uniéndonos, poder consagrar nuestros sueños y poder llevar la salsa a lo más alto”, comparte.

Y, al final del camino, las “Sesiones desde la loma” han probado, una y otra vez, por qué su fórmula ha sido exitosa. Así lo explica Gabriel Ramos, productor del evento, que con tan solo 27 años, se ha convertido en uno de los pulmones del proyecto.

“Este evento en particular es la conversión de lo que nosotros hacemos digital, es la realización. Es sentir el cariño de todas las personas que nos siguen y nos apoyan. El evento está pensado de manera que siempre tengamos participación de veteranos y de personas jóvenes, de artistas emergentes que están buscando un espacio. Aquí tienen fanáticos que están dispuestos a escuchar sus propuestas musicales, y en parte de eso se trata el evento”, dice.

Haciendo eco de las palabras de Norberto, Gabriel, quien ha estado envuelto con “la loma” desde su primer episodio, sabe que lo que están haciendo tiene un valor que va más allá de lo monetario o del éxito profesional. Detrás de cada sesión, detrás de cada evento, hay algo que no se puede comprar: humanidad.

“Yo creo que lo que hace que la gente conecte tan bien con este proyecto es lo espontáneo. Que es natural. Aquí nada es forzado, la música se siente genuina, todo se crea con amor. La energía que rodea al proyecto es tan buena, que yo siento que eso se transmite digitalmente. Todo lo que hacemos, lo hacemos porque nos apasiona, porque nos gusta. Esa es la clave de esto, que se hace esmero y con amor. Yo creo que somos un pilar y un referente ahora mismo de la salsa, y nos estamos encargando de que todas las generaciones reciban algo: que los veteranos cojan nuevos aires y que los jóvenes cojan impulso. Yo creo que tenemos que empezar a buscar donde hacer un evento más grande, porque ya los lugres nos están quedando pequeños, vienen nuevos episodios Desde la loma y, Dios mediante, muchos eventos más”, concluye el joven mientras las notas sabrosas de una salsa gorda retumban en el aire.