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La subida de 15 minutos para deleitarse observando el sur de Puerto Rico desde Pico Rodadero en Yauco puede recargarte muchísimo más de lo que imaginas.

Paseos como este te permitirán practicar lo que se conoce como ‘descanso activo’, en el que el cerebro no necesita enfocarse en tareas específicas como las del trabajo y ‘enciende’ otras funciones que estudios han vinculado con una mayor creatividad.

Expertos aconsejan planificar con frecuencia momentos de ‘descanso activo’ junto con practicar hábitos para tener un sueño reparador, como te explicamos en este artículo.

Para ayudarte a lograrlo, le preguntamos a los guías certificados Ray Rodríguez, de Veredas de mi Tierra, y Norymar Maldonado, de Soraya Tours, qué rutas de senderismo y otras experiencias nos recomiendan alrededor de la isla. Esto respondieron.

Rodríguez lo describe como “un espacio seguro para las personas que están comenzando en el senderismo o quieren tener una experiencia de fácil acceso”.

Tiene una cascada hermosa y podrás alquilar un área para pasar el día allí. “No se permite otro sonido que no sea el de la naturaleza, así que es un lugar que te garantiza que tengas un contacto chévere con la naturaleza sin perturbación de ningún otro ruido”, agregó.

Este paseo y la mayoría de los que guía Rodríguez cuestan 35 dólares y duran unas 4 horas.

Otro paseo de fácil acceso en el que con una caminata de 10 a 15 minutos llegarás a “un lugar mágico del que no te querrás ir, donde el agua es sanadora, cristalina (...) Literalmente le digo que es como un bautismo”, describió Rodríguez.

Este bosque cuenta con varias veredas y la guía Normary Maldonado nos dijo que su favorita es la del guayacán centenario, “porque vamos de camino a conectar con un árbol que fue sumamente importante para las civilizaciones antiguas de América tropical. Ir al bosque es ir adentro de uno mismo, allí nos conectamos con lo que nuestros ancestros dejaron”, explicó.

Un lugar “lleno de vida, todo lo contrario a lo que uno asume cuando te hablan de un bosque seco”, gracias a su biodiversidad.

Si vas es bueno que sepas que es un lugar caluroso para el que tendrás que llevar ropa e hidratación adecuados. Más abajo te damos las recomendaciones de los expertos. El costo de conocerlo mientras Maldonado te pone en contexto las bondades de este bosque es de 38 dólares.

Con otra caminata corta por el bosque podrás llegar a un río de aguas cristalinas “que invita a refrescarnos y renovarnos”, dijo Rodríguez.

“Es una caminata de una media hora y fácil acceso. A las personas que están empezando se les va a hacer súper chevere. El lugar es espectacular, el agua es refrescante (...) Es para quienes les gusta darse el chapuzón después de la caminata”, detalló Rodríguez.

Un poco más retante que las rutas anteriores pero todavía llevadera, según explicó Rodríguez, para quienes están en el nivel principiante. “Dices ‘wow, este tesoro está escondido en el área metropolitana y yo no lo sabía’”.

Lo harás con material recogido allí mismo por al artesano local Ubaldo Collazo y, de paso, aprendiendo de la mano de Normary Maldonado “un poco de trasfondo histórico del lugar donde vamos a estar ubicados, ya que Tibes es uno de los barrios donde se encuentra el Centro Ceremonial Indígena más grande y antiguo del Caribe”.

“Es una experiencia rústica, ecológica, donde te mostramos que no importa donde tú estés puedes confeccionar las maracas y que los materiales están ahí, la naturaleza los provee”, explicó.

Así de imponente es este lugar, al que se llega después de una caminata empinada de 15 minutos. Una vez arriba tendrás “una vista panorámica de todo el sur y parte del oeste, donde te sientes al nivel de las nubes, teniendo esa vista privilegiada que también tuvo Agüeybaná en el pasado, desde Guayama hasta Mayagüez”, describió Rodríguez.

“Una caminata hermosa donde siempre estamos bajo el bosque y cruzando el río Guamá, son básicamente las faldas del Monte del Estado entre Maricao y San Germán”, dijo Rodríguez.

“Es una caminata donde tienes una experiencia de los vientos alisios por el norte y el calorcito del sur, con una panorámica desde Guayama hasta Juana Díaz, de frente al Mar Caribe, y cuando subes ves hasta El Yunque, una vista prácticamente de 360 grados cuando llegas al pico”, contó Rodríguez.

No te vayas sin abrazar la roca porque es “un espacio sanador”. Bajar será igualmente hermoso, porque te adentrarás en el bosque y terminarás la experiencia con un almuerzo preparado por personas de la comunidad.

Trata de planificarlo con un guía experimentado. “Lo ideal es que tengas un guía, porque cuando alguien está comenzando en el senderismo es importante que conozca de qué se compone el bosque, por qué se forma el espacio donde está, que tenga un contacto histórico y con la naturaleza”, explicó Rodríguez. Una vez conozcas el lugar, lo puedes visitar replicando por tu cuenta las recomendaciones de los expertos.

Si es una ruta por un río. Lleva sandalias de ‘outdoor’.

Si es por un bosque. Lleva entonces botas de ‘hiking’ que cubran los tobillos. Esto porque estarás expuesto a raíces y elementos sueltos, explicó Rodríguez.

Ve con ropa adecuada. Camisa de manga larga si vas a estar expuesto al sol y de un color claro porque los oscuros absorben más luz. “Así evitas tener una temperatura corporal excesiva”, dijo Rodríguez. También es aconsejable llevar un sombrero.

Hidratación. Agua y otras bebidas hidratantes como agua de coco, recomendó el guía. Prepara, además, una merienda liviana para llevar en tu mochila.

Más protección. Bloqueador solar, repelente contra insectos y medicamentos si padeces alguna condición que pueda requerirlos.

Muy importante. Lleva contigo solo lo necesario, pues cargar mucho peso te puede complicar durante la ruta.