Servicio de noticias
Producido externamente por una organización que confiamos cumple con las normas periodísticas.
¿Gruñir o gritar durante el ejercicio puede dar más energía?

Todos hemos escuchado a esas personas que en el gimnasio hacen ruido cada vez que levantan pesas

2 de septiembre de 2024 - 8:11 PM

No es sorprendente que la investigación sobre los gritos atléticos sea un poco escasa. (Shutterstock)

Todos hemos escuchado a esas personas en el gimnasio que hacen ruido cada vez que levantan pesas. ¿Estos sonidos realmente mejoran el rendimiento deportivo o solo distraen a los demás?

Los beneficios fisiológicos

No es sorprendente que la investigación sobre los gritos atléticos sea un poco escasa. Algunos estudios pequeños sugieren que puede mejorar la fuerza, la potencia y el uso de oxígeno, pero los investigadores no están seguros de cómo funciona.

La mayoría de los beneficios tienen menos que ver con el sonido en sí y más con la forma en que respiramos antes, según Mary J. Sandage, profesora de habla y lenguaje en la Universidad de Auburn, en Estados Unidos, quien estudia actividades físicas extremas y el habla.

Sandage señala que algunos estudios han descubierto que algunas personas a las que se les ha removido la laringe, y por lo tanto ya no pueden retener aire en sus pulmones, tienen dificultad para levantar objetos pesados. Esto sugiere que parte de nuestra fuerza puede provenir de algo llamado maniobra de Valsalva, en la cual se ejerce presión en los pulmones mientras se cierra la garganta (similar a empujar durante una evacuación).

“Lo hacemos para producir fuerza. Necesitamos hacer una trampa de aire para levantar o empujar”, explica la profesora. Crear presión interna en el núcleo de esta manera puede reforzar la columna vertebral y permitir que se produzca un poco más de potencia. El gruñido, entonces, actúa como una válvula de escape para esta presión. Para Sandage, los beneficios del gruñido probablemente se aplican solo a explosiones cortas de esfuerzo, como levantar un peso o golpear una pelota de tenis.

Los beneficios psicológicos

Existe, por supuesto, otra explicación de por qué gruñir es útil: podría ser principalmente mental.

“También lo veo como una manera de enfocar la atención. Como una liberación emocional y canalización”, afirma Sarah Ullrich-French, psicóloga deportiva.

Gritar no es la única forma de hacerlo. Algunos prefieren la respiración consciente, mientras que otros pueden concentrar sus ojos en un punto fijo, pero la idea es encontrar una zona mental donde el rendimiento parezca más fácil. Además, la psicóloga señala que las técnicas de enfoque pueden ayudar a sintonizar mejor con el propio cuerpo y aumentar los beneficios del ejercicio para la salud mental.

En las artes marciales japonesas, por ejemplo, los atletas utilizan la meditación y las vocales cortas y gritadas llamadas kiais para concentrar su energía. Hacer ruido también puede ayudar a establecer un ritmo, ya que generalmente gruñimos en el pico del esfuerzo, como indica Scott Sinnett, psicólogo cognitivo que ha estudiado la vocalización en deportes competitivos.

Sandage coincide en que los beneficios son tanto psicológicos como fisiológicos. Y diferentes tipos de ruidos podrían servir a diferentes propósitos.

Las cuestiones sociales

Independientemente de si hacer ruido mejora o no tu rendimiento, definitivamente afecta a las personas a tu alrededor. Un buen gruñido puede incluso cambiar la forma en que tu oponente de tenis evalúa tu saque, enmascarando el sonido del golpe.

“Si no puedes escuchar el sonido de la pelota y el efecto que produce, ni su peso, esto te afectará”, reflexiona Marjorie Blackwood, tres veces campeona canadiense de tenis que ha pasado los últimos 40 años entrenando y trabajando en el deporte.

Sinnett añade que, para un jugador novato, puede ser solo una distracción escuchar a alguien gruñirle.

Aunque esos mismos gruñidos y lamentos en el gimnasio, durante el levantamiento de pesas, pueden distraer a tu vecino, no deberías contenerte la próxima vez que quieras exprimir ese último resquicio de energía, según Sandage. Ella destaca que existe un estigma en torno a las personas, especialmente las mujeres, que hacen ruidos fuertes mientras se ejercitan. Por ello, anima a las personas a utilizar cualquier herramienta que tengan a su disposición.

Pero si realmente no te gusta, Sinnett afirma que una exhalación fuerte y rápida puede ser tan eficaz como un gruñido. Por su parte, Blackwood cree que no hay problema en hacer un pequeño ruido, pero que no debes exagerar, ya sea en la cancha, en el gimnasio o en un pacífico bosque nacional. “Pequeños ruidos”, propone.

Popular en la Comunidad


Ups...

Nuestro sitio no es visible desde este navegador.

Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: