San Juan - Los vinos de la Denominación de Origen Ribera del Duero admiten una enorme variedad de maridajes, mayormente desde la incorporación del vino blanco a su reglamentación. Sus vinos de mayor crianza son ideales para platos de cocciones más largas y aromas más intensos. Asimismo, los más jóvenes y afrutados para platillos ligeros y sutiles.

Precisamente, en días recientes, la reconocida marca organizó un exclusivo evento de tapas y tintos en el reconocido restaurante Culinary U, en San Juan, con el fin de ofrecer una experiencia sensorial única. El Nuevo Día estuvo presente en la velada donde, además, se destacó la excelencia y la diversidad de los vinos de Ribera del Duero, maridados con una exquisita selección de tapas confeccionadas por los propios invitados.

La cata fue dirigida por la sommelier Amber Rivera. La cocina, de igual manera, fue capitaneada por el chef Fernando Rivera.

El primer vino de la noche fue el Convento Oreja Roble de Bodegas Convento Oreja. Este fue pareado con pan con tomate. La receta incluyó pan, tomate, aceite de oliva extra virgen, dientes de ajo, zumo de limón y sal kosher.

Este vino se define como uno joven con intensas notas de frutas rojas y negras, y sutiles matices especiados derivados de su breve paso por barrica.

La exquisita experiencia culinaria continuó con Prumo de Bodega Finca Villacreces. El platillo estrella, que causó sensación entre los presentes, fue el tartar de atún al estilo Vasco. Este fue confeccionado con atún fresco, pepinillos, alcaparras, limón amarillo, vinagre blanco, aceite de oliva extra virgen, albahaca, perejil y pimiento picante rojo.

El vino cautivó a los asistentes con su perfil de fruta madura, acompañado de notas de cacao y un toque de regaliz.

Montelaguna JOTAS de Bodegas Dehesa Valdelaguna fue la tercera etiqueta en llegar a la mesa. Los comensales pudieron degustarlo con unos champiñones marinados con vino blanco y jerez como acompañante. Para la creación de este platillo se necesitó champiñones, aceite de oliva extra virgen, vino blanco, jerez, limón verde, ajo, sal, pimiento y perejil.

El vino se distinguió por su complejidad notable, con una estructura robusta y taninos suaves.

La noche cerró con Dominio de Águila Reserva de Bodega Dominio de Águila. Para maridarlo, Rivera se decantó por un filete de res relleno. Los materiales que reinaron fueron filete de res, jamón serrano, pimientos de piquillo y queso manchego.

Esta etiqueta en específico combina los frutos del bosque, toques de trufa y madera bien integrada.

Tapas y Tintos, un evento que dejó a más de uno sintiéndose como todo un chef, forma parte de una serie de iniciativas de la Denominación de Origen Ribera del Duero para promover la cultura del vino y su maridaje con la gastronomía.