Muchos llegan a la Panadería La Patria en Morovis para saborear el famoso pan de la “patita echá”, una receta de origen español que venció las vicisitudes de épocas trascendentales, pues, permanece inalterada desde su creación en 1862.

Su nombre proviene de la forma del alimento, que se asemeja a las extremidades inferiores del humano, entrelazadas, provocando la curiosidad de aquellos que acuden al local, que aún conserva el horno de ladrillo donde se confecciona la popular masa.

De acuerdo con el propietario, Edwin Ortiz Rivera, “esta panadería, si nos remontamos al siglo 19, se elaboró el horno de ladrillo por los españoles y en el transcurso del tiempo fue que se hizo la estructura alrededor, que se creó la panadería. Pero siempre era un horno a campo abierto”.

“Esto antes era un campo completo y, la panadería estaba en otra calle. Al abrirse esta nueva extensión, que es la carretera PR-155, se giró la panadería para acá. Se estaba horneando solo pan, y poco a poco, con las extensiones alrededor de la estructura, pues, fueron expandiendo a sándwiches y otros productos de una panadería regular, pero antes solo se vendía pan”, expuso el comerciante de 41 años.

El moroveño señaló que la propiedad perteneció primero a los españoles y luego pasó a varias familias en ese pueblo, entre estas, “Parés, Ayala y ahora los Ortiz”.

De hecho, Edwin estudió electrónica de aviación en Carolina y, su único vínculo con los negocios era a través de su padre, Edwin Ortiz Soto, propietario del supermercado Selectos de Morovis.

“Yo era supervisor de vendedores en una gran compañía de distribución de carnes en Puerto Rico, mi familia siempre ha sido de comercio y, como no encontré futuro aquí en Puerto Rico en lo que estudié, terminé cogiendo un curso de supervisor y empecé a trabajar en el supermercado con mi familia”, admitió.

Destacó que adquirió la panadería en el 2010 y, en ese momento, no conocía sobre la operación del negocio. Pero se quedó con los empleados quienes dieron continuidad a sus labores y, ahora cuenta con 11 trabajadores.

Sobre el pan de la “patita echá”

El comerciante explicó que, “a este pan le llaman así, toda la vida, porque son dos masas que se unen y parece una patita echá (sobre la otra). Sabe diferente, es una receta española”.

“Es una mezcla de pan de manteca, pan de agua y, con unos aditamentos adicionales, se crea el pan de la patita. Ese pan lleva aquí toda la vida, van más de 161 años que lleva elaborándose. Entonces, viene mucha gente de pueblos limítrofes a buscar el pan de la ‘patita echá’”, manifestó.

Ortiz Rivera relató que, anteriormente, el pan se horneaba en leña, según le contaron los viejos del pueblo. Todo de manera artesanal.

“Por las mañanas, era cuando se elaboraba el pan en leña. El horno tiene una chimenea y ese olor a pan daba por todo el pueblo para abajo y ya la gente sabía que se estaba horneando pan, por el olor que salía de la chimenea. Ahí la gente subía a comprar pan. Era a peseta, a 50 centavos, para esos tiempos”, indicó.

“Ahora, por regulaciones del Departamento de Salud, ya no podemos elaborarlo de esa manera. Se trabaja ahora con gas, después que el horno esté caliente. Antes se hacía todo a mano, sin máquina, se amasaba a mano, se elaboraba a mano. Aunque ahora sigue siendo artesanal, la única diferencia es que no lo amasa una persona, sino una máquina”, agregó.

Así las cosas, el panadero enciende el horno a las 4:00 de la madrugada y, a las 5:00 ya está la gente esperando el pan recién horneado.

“Aparte del pan de la ‘patita echá', tenemos pan dulce, de agua, todo tipo de sándwiches creados por la casa, entre estos, el Selecto, Patria, el Chupacabras, entre otros. Por ejemplo, el Selecto es una mezcla de todas las carnes que son elaboradas y asadas, como pernil asado, pavo asado, jamón dulce, jamón de sándwich”, explicó.

“El Patria se compone de todos los cortes deli: jamón de pavo, de sándwich, bolo, mortadela y salami. El chupacabras es una mezcla de ambos que tiene parte carne y cortes fríos. Se hace en el pan que prefiera la persona”, esbozó.

Por su parte, su esposa Laila Salim, relató que, “muchas veces, cuando vienen clientes, piden el pan acabado de sacar del horno. Lo piden con mantequilla y, se sientan con su café. Hay clientes que vienen y dicen: ‘Si compro una libra de pan, no llega a casa’. Así que se llevan dos”.

“Esta panadería es tradición en Morovis. Que vengan, que la visiten y compren el producto para que sepan qué rico es este pan. En navidades es cuando más se busca”, aseguró Ortiz Rivera.

Para detalles: 787-862-2867 o en las redes sociales como: Panadería La Patria.