Si entre tus opciones está someterte a un procedimiento para refrescar el rostro, es fundamental contar con la información necesaria para tomar una decisión informada y segura
Si entre tus opciones está someterte a un procedimiento para refrescar el rostro, es fundamental contar con la información necesaria para tomar una decisión informada y segura
27 de noviembre de 2024 - 11:10 PM
Cada vez más personas en Puerto Rico optan por tratamientos estéticos para mejorar su apariencia física y refrescar la piel de su rostro. Uno de los procedimientos más populares son los neuromoduladores, como el de la marca Bótox, que mediante inyección ayudan a suavizar las líneas de expresión y prevenir la formación de arrugas.
La doctora Noelani González, dermatóloga y fundadora del centro de estética SEREN Dermatology, compartió con Magacín las claves sobre qué esperar del tratamiento y la información necesaria para tomar una decisión informada y segura.
Los tratamientos neuromoduladores o con neurotoxinas, son procedimientos inyectables que se utilizan principalmente para reducir las líneas de expresión en la piel y rejuvenecer el semblante.
“Básicamente, se inyecta toxina botulínica en el músculo para relajarlo y que el músculo no contraiga tan fuerte. Y así evitamos que esas líneas de expresiones se vean tan marcadas en el rostro”, explicó González, dermatóloga graduada y subespecializada en cosmética con un ASDS Cosmetic Fellowship de Mount Sinai Hospital, en Nueva York.
Comúnmente conocidos por el nombre de Bótox, que es una de las marcas más populares entre las aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), estos tratamientos estéticos actúan descontracturando los músculos responsables de las arrugas, especialmente aquellas que se forman con el movimiento repetitivo en áreas específicas, como las líneas de la frente, las “patas de gallo” alrededor de los ojos y las líneas del entrecejo.
Si estás considerando hacerte un tratamiento con neuromoduladores antes de un evento importante o para alguna ocasión especial, ten en cuenta que los resultados no son inmediatos, por lo que deberás planificarlo con anticipación.
“No vas a ver el efecto del Bótox automáticamente, sino que los resultados completos se ven aproximadamente a las dos semanas de uno haberlo inyectado”, aclaró González.
La recuperación tras las inyecciones de neurotoxinas es bastante rápida y, según la dermatóloga, los efectos secundarios -si alguno- son mínimos, por lo que en muy poco tiempo podrás continuar con tu rutina habitual.
“Una vez se inyecta aquí en la oficina, cuando sales, se pueden marcar como si fueran unas picaditas de mosquitos en esa área donde se te inyectó el Bótox, pero eso se resuelve pasados los 5 o 10 minutos”, aseguró la especialista.
Algunas personas, por otra parte, podrían experimentar un leve dolor de cabeza tras las inyecciones, lo que suele ser fácilmente manejable con un analgésico como acetaminofén.
En promedio, los efectos de los tratamientos con neuromoduladores, duran de tres a cuatro meses.
“Después de eso, si la persona no se quiere hacer más nada, no le queda nada y vuelve a su normalidad. O sea, que si le gustó el efecto, puede volver a repetir el procedimiento pasados los cuatro meses”, detalló la dermatóloga.
Sin embargo, y como es sabido que todo en exceso puede hacer daño, González recomienda espaciar los tratamientos cada tanto para evitar efectos indeseados.
“Si un paciente lo está haciendo demasiado a menudo (el tratamiento), le puede crear como una atrofia en ese músculo porque no lo está utilizando”, advirtió.
Antes de someterse a un retoque estético, la evaluación inicial realizada por un profesional médico es un paso previo fundamental, ya que permite determinar las necesidades específicas de cada paciente.
“Primero se hace una consulta completa. No tan solo para el Bótox, también hablamos de la calidad de la piel, de si necesitan algún tratamiento para mejorar la calidad y su régimen de piel. Se les da hasta un plan anual de lo que deben de estar siguiendo, y luego de esa conversación, la persona escoge qué le gustaría hacerse”, detalló González.
Para asegurar los mejores resultados y evitar complicaciones, es importante seguir algunos cuidados. La doctora recomienda llegar con el rostro limpio y sin maquillaje al tratamiento para evitar posibles infecciones.
Además, el día del procedimiento, se sugiere evitar actividades físicas intensas. “Les pedimos que no hagan ejercicios por 24 horas y que no se recuesten completamente ‘flat’ por al menos cuatro horas después de las inyecciones”, subrayó la experta.
La FDA aprobó el uso de tratamientos de inyección de neurotoxinas en personas mayores de 18 años. Tomando esa franja etaria como punto de partida, González opina que no existe una edad específica para comenzar con este tipo de tratamiento y la necesidad varía según factores como la genética y los hábitos de cada paciente.
“No hay una edad en particular que yo te pueda decir ‘ya a los 30 todo el mundo tiene que hacérselo’, como muchos pueden pensar. La necesidad es según cada persona, porque algunas, incluso en sus ‘early 20′, ya pueden tener líneas marcadas debido a una mayor expresión facial. Y, por otro lado, hay quienes a los 45 años aún no presentan líneas visibles”, afirmó la dermatóloga con más de siete años de experiencia.
Las noticias explicadas de forma sencilla y directa para entender lo más importante del día.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: