5 de marzo de 2025 - 6:22 PM
Los retos, las vicisitudes, los estigmas, los cuestionamientos, los estereotipos, la falta de inclusión y los múltiples “no” que han enfrentado en la música y en el teatro musical, todos, han sido combativos con una misma nota: la autencidad de ser únicas sin claudicar a lo que son y representan.
Esa es la fórmula que comparten y en la que coinciden la actriz y cantante Didi Romero, la cuatrista y compositora Fabiola Méndez, la directora musical y profesora Yabetza Vivas y la violista, profesora y musicoterapeuta Marta Hernández a la hora de destacarse y perseguir metas y sueños desde los diferentes escenarios musicales en los que se desarrollan. Ser auténticas, sin mediar disfraces y no rendirse ha sido para cada una el impulso correcto a la hora de labrar un trayecto admirable, que también es puente e inspiración para otras mujeres, crear comunidad y representar la puertorriqueñidad en el mundo.
Sobre esto y de sus experiencias profesionales en la industria de la música, en los escenarios teatrales y la musicoterapia dialogaron, hoy, 5 de marzo, las cuatro profesionales en el primer conversatorio “Armonías de poder: el rol de la mujer en la música” como parte del proyecto Mujer del Año 2024, creado por la plataforma Magacín de El Nuevo Día. El lugar de encuentro y de conversación fue el concesionario Genesis en Plaza Las Américas, marca aliada por segundo año consecutivo al proyecto junto con Reinhold Jewelers. La actividad también contó con el patrocinio de VSuarez & Co. Walmart.
El conversatorio moderado por la editora de Magacín, Leyra E. González, fue un revelador encuentro donde las cuatro profesionales, todas reconocidas en el proyecto “Mujer del año 2024”, compartieron vivencias, miedos y experiencias de vida con la audiencia que disfrutó de la sinceridad, sencillez, consejos y espontaneidad de las panelistas.
La directora General de GFR Media, Yalixa Rivera Cruz dio la bienvenida a las invitadas y ejempliflicó como una de las gestoras de "Kilómetros de Cambio", movimiento social que reúne a corredoras de Puerto Rico para alzar la voz en contra de la violencia de género, ha logrado transformar vidas, tal y como lo hacen las cuatro panelistas desde sus espacios, logrando vencer el machismo, el maltrato y los prejuicios.
“Hay prejuicios que se van perpetuando y se presentan en momentos en que te podrían hacer dudar. Uno no puede permitir que comentarios prejuiciados muchas veces te hagan olvidar quién eres y tu propósito. Uno debe validar lo que ha logrado y reconocer que todas tienen un espacio y ese espacio es único”, indicó Vivas, quien fue la tercera mujer puertorriqueña en estudiar dirección orquestal y la primera en dirigir un concierto de temporada clásica con la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico.
Vivas habló sin tapujos de cómo el sector de la música clásica es dominado por hombres, sin apenas espacio a las mujeres y que en sus años de bachillerato en Educación Musical por el Conservatorio de Música de Puerto Rico fue víctima de prejuicio al ser cuestionada por su cabello rizado y hasta por el uso de la chaqueta de cola larga “que llamaría la atención al estar de espalda” por su figura. Vivas confesó que ese machismo lamentablemente sigue presente, pero ella reiteraría que “jamás el físico define el talento de una persona”.
Por su parte, Romero, actriz y cantante de Broadway, dijo que ser “auténtica y payasa” es lo que la hace destacarse en cada audición que asiste, porque la vida de una actriz se basa en más de 80% de audiciones. “Ser auténtica y honesta y payasa es lo que me define”, mencionó la actriz que se encuentra en la isla por su participación en el musical “Rock of Ages” que se presenta en el Centro de Bellas Artes en Santurce.
La hija de la cantante y presentadora Deddie Romero, contó que ha sido víctima de discrimen y prejuicios en Estados Unidos “por no ser considerada muy latina para obtener un papel, o por ser latina” en proyectos en el mercado anglosajón. Ella responde a ese tipo de comentarios discriminatorios con su extraordinario talento.
La actriz y cantante confesó a la audiencia que uno de sus miedos es dar a conocer y lanzar canciones originales que ha escrito. Admitió que debe salir de su “zona de confort” para atreverse a lanza su música, por lo que está segura que en lo hará en el futuro.
En el caso de la cuatrista y compositora Méndez reconoció que “la rebeldía fue mi gasolina” para abrazar el instrumento nacional y llevarlo al mundo. La primera cuatrista puertorriqueña en graduarse del prestigioso Berklee College of Music, en Boston, señaló que ha enfrentado más resistencia en Puerto Rico porque el cuatro lo etiquetan en la música jíbara o solo para escucharse en la época festiva de las navidades. En cambio, su experiencia en otros países o en la diáspora puertorriqueña es que el cuatro es considerado un instrumento para tocarse todo el año. No obstante, vive orgullosa de representar la cultura puertorriqueña con su talento desde cualquier rincón de esta isla o en el mundo.
La violista, profesora y musicoterapeuta Hernández, por su parte, aprovechó el diálogo para detallar cómo la musicoterapia es una herramienta valiosa e infalible en proporcionar bienestar físico, emocional y psicológico a pacientes, estudiantes, población adulta en los centros de envejecientes y a las personas en general. Para ella, el impulso que la hace moverse es la educación y según dijo, su meta es poder lograr que la musicoterapia tenga una mayor accesibilidad.
Al final del encuentro las panelistas compartieron con las invitadas del conversatorio.
Las noticias explicadas de forma sencilla y directa para entender lo más importante del día.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: