Goodwill, la cadena de artículos de segunda mano, inaugura mañana martes, 11 de marzo, su primera tienda en Puerto Rico, con casi 50 empleados, en el antiguo local de Ikea en Plaza Escorial en Carolina.

Al entrar a la tienda, el consumidor encontrará los distintos departamentos: ropa para damas, hombres, niños, calzado, muebles y artículos de decoración para el hogar, entre otros.

“Comprar en Goodwill es sumamente accessible. Toda la comunidad va a poder acceder a la mercancía porque los precios son bien competitivos”, expresó Francisco Rodríguez, director regional de Goodwill Puerto Rico.

La clientela puede pagar con dinero en efectivo, Visa, MasterCard, ATH regular y ApplePay. Rodríguez explicó que mientras más mercancía adquieran los clientes, más beneficios obtienen a través del programa de recompensas para el que deben registrarse.

“Goodwill es una tienda con propósito. Ayuda a las comunidades y al ambiente. Nuestra misión es social. Estamos muy entusiasmados de dar a conocer a Goodwill a donantes y consumidores en el país”, manifestó Kent Kramer, presidente y principal oficial ejecutivo (CEO por sus siglas en inglés) de Goodwill Puerto Rico.

Kramer conoce bien el segmento de comercio al detal, pues antes de ingresar a Goodwill hace 22 años, trabajó con las cadenas Walmart y Kmart.

El CEO indicó que la entidad con enfoque social surgió en 1902 en Boston por parte de un ministro –el reverendo Edgar Helms-, quien originalmente recolectaba donaciones de ropa y artículos del hogar para repartirlos entre sus feligreses, muchos de los cuales eran inmigrantes y de escasos recursos.

Hace un año, Kramer viajó a Puerto Rico para explorar la posibilidad de abrir tiendas en la isla. La empresa tiene más de 3,000 puntos de venta en decenas de países, como Estados Unidos, Corea del Sur, Brasil, México, Panamá, Venezuela, Canadá y Uruguay, entre otros.

Su entrada a Puerto Rico requirió una inversión de $5 millones para lanzar las primeras tres tiendas, un almacén y sus programas de misión. La segunda tienda estará en Los Colobos en Carolina y la tercera en el antiguo edificio Olazábal en Bayamón.

Todavía no hay fecha para esas aperturas, pero ambas abrirán este verano. La meta es que Goodwill tenga 175 empleados en Puerto Rico a finales de este año, dijo Kramer. Agregó que para el 2026 buscarán continuar con la expansión en otros puntos de la isla.

Por su parte, José Carlos Aponte Dalmau, alcalde de Carolina, dijo estar agradecido de que la cadena haya escogido a Carolina para establecer sus dos primeras tiendas en la isla. Sostuvo que cuando el CEO de Goodwill Puerto Rico lo visitó el año pasado para hablarle de la misión y el concepto de Goodwill, quedó impresionado.

“Kramer me habló de comercio social. Yo nunca había escuchado este término y le dije que eso era algo especial y que quería que estuviera en Carolina. La incógnita era dónde establecerlo”, indicó Aponte durante la conferencia de prensa. Tenía que ser un local comercial, según el alcalde, que tuviera una buena localización y fuera accesible a los consumidores.

“Dios premia al buen dador”, agregó Aponte Dalmau, al señalar cómo surgió el primer espacio. Contó que Ikea se iba a mudar de Plaza Escorial a otro local más amplio en la Ciudad de Gigantes, y ese establecimiento que dejó resultaba idóneo para montar la primera Goodwill en Puerto Rico.

La tienda operará de lunes a sábado, de 9:00 a.m. a 9:00 p.m. Los domingos abrirá de 11:00 a.m. a 7:00 p.m. Las personas podrán hacer donativos de mercancía en ese mismo horario.

Goodwill pondrá en marcha un programa de salud materna para madres primerizas de bajos ingresos. El programa Goodwill Nurse-Family Partnership conecta a las familias con una enfermera graduada para que realice visitas continuas a domicilio, desde el embarazo hasta el segundo cumpleaños del niño.

La tienda de Plaza Escorial exhibe en el exterior el mural Vida de una Donación, obra original adaptada por The Stencil Network, del artista puertorriqueño Juan Ramón Gutiérrez.

La inversión de Goodwill en Puerto Rico incluye también el empleo de “Mission Coaches”, que son entrenadores de vida y carrera que trabajan con los empleados de Goodwill para ayudarles a establecer y perseguir metas personales y profesionales.

De otro lado, el director regional de Goodwill Puerto Rico indicó que desde noviembre pasado, han recibido unas 200 solicitudes de empleo, la mayoría de Carolina y pueblos limítrofes. El reclutamiento para la tienda de Bayamón comenzará en mayo próximo.

Sobre las personas que donen mercancía a Goodwill, Rodríguez señaló que la cadena les entregará un recibo que podrán incluir al desglosar los donativos en su planilla de contribución sobre ingresos.