El 2024 terminó como el año más caluroso registrado por el Servicio Nacional de Meteorología (SNM) en San Juan, con una temperatura promedio de 83.3 grados Fahrenheit (°F), superando el récord anterior de 82.3 °F establecido en 1983, reveló la mencionada agencia.

En su recién publicado informe anual, el SNM también reveló que se establecieron o empataron 131 récords diarios de temperaturas mínimas más cálidas, y que la zona de San Juan alcanzó temperaturas iguales o superiores a los 90 grados durante 182 días.

“Hubo 50 días consecutivos con máximas de 90 grados o más”, dijo la agencia, que especificó que, “en 2024, San Juan estableció un nuevo récord de noches más cálidas, con 128 días que no bajaron de los 80 °F”, superando la marca anterior de 89 noches establecida en 2023.

El año 2024 registró un hito histórico en el sitio climático del Área de San Juan, ya que tanto la temporada de verano como la de otoño terminaron como las más cálidas registradas, según la agencia.

La temperatura media del verano (junio-agosto) alcanzó una cifra sin precedentes de 85.9 °F, superando el récord anterior de 85.1 °F establecido en 2023.

Del mismo modo, la temperatura media durante los meses de otoño (septiembre-noviembre) fue de 85.8 °F, superando también el récord de 2023 de 85.1 °F.

“Estas temperaturas récord ponen de manifiesto la aceleración de la tendencia al aumento del calor en la región, lo que plantea importantes implicaciones para la resiliencia climática y la salud pública”, alertó la agencia meteorológica en su informe.

Otro dato importante revelado por la agencia es que la red de boyas cercanas a la costa CariCOOS observó anomalías de temperatura del agua más cálidas de lo normal durante todo el año, según el informe.

Asimismo, el reporte revela que la mayoría de las muertes en 2024 relacionadas con las condiciones meteorológicas se atribuyeron a las corrientes marinas. El informe no brinda un número específico sobre los decesos.

El dato surge en momentos en que se advierte que una marejada está provocando oleaje sumamente peligroso en las costas de Puerto Rico. Durante este fin de semana, el SNM alertó sobre olas rompientes de hasta 15 pies.

En declaraciones a El Nuevo Día, la meteoróloga, Glorianne Rivera, explicó que “las condiciones marítimas en Puerto Rico todo el año están de moderadas a riesgo alto de corrientes marinas, especialmente en las playas expuestas del norte”.

“Nuestra exhortación es, (cuando las condiciones están peligrosas), que se mantengan fuera del agua. Llevamos el mensaje y lo seguimos recalcando todos los días del año, que si ven riesgo moderado a riesgo alto de corrientes marinas, (que se mantengan) fuera del agua”, agregó.

De otro lado, la agencia indicó que los incidentes con rayos también fueron notables durante el 2024, con al menos ocho eventos documentados, los cuales incluyen el evento reportado el 27 de mayo de 2024 en la playa Montones en Isabela, que afectó a tres menores.

En aquel momento, una mujer que se encontraba de visita con su familia en el parador Villas del Mar Hau, en Isabela, relató a El Nuevo Día el impactante momento. Mishka García fue una de las primeras personas en reportar el suceso al Sistema de Emergencias 9-1-1.

“Yo no pude ver exactamente cuando pasó el hecho exacto, lo único que escuché fue una explosión, como un cuarto de dinamita. Como si explotara algo bien fuerte y una luz azul resplandeciente. Pero no noté cuando el niño cayó”, recordó García a este medio.

Los otros eventos de rayos documentados fueron: el 7 de septiembre en el residencial Fray Bartolomé de las Casas en Santurce; el 7 de septiembre en la urbanización Mirador del Sol en Cabo Rojo; el 9 de septiembre en la PR-100 en Cabo Rojo; el 13 de septiembre en el Balneario de Boquerón en Cabo Rojo; el 20 de septiembre en el barrio La Plata en Lajas; el 21 de septiembre en la calle Reina en el sector La Línea en Morovis; y el 22 de septiembre en Cidra.

La agencia también enfatizó que, además de los mencionados eventos de rayos, también se reportaron tormentas eléctricas, eventos de polvo del Sahara, fuegos forestales y hasta tornados.

Sobre este último particular, en mayo de 2024, se reportó que un tornado se desarrolló en el municipio de Arecibo, causando estragos en algunos árboles y letreros de este municipio durante 10 minutos.

En aquel momento, el meteorólogo Ernesto Morales explicó a este medio que este tornado “entró por la playa Abacoa y siguió moviéndose por la (carretera) 681 y brinca hacia donde es la pista de carrera”.

En el informe, además, la agencia meteorológica abordó el impacto de la tormenta tropical Ernesto, que causó grandes estragos en Puerto Rico en agosto de 2024.

“La tormenta tropical Ernesto se convirtió en huracán cuando se desplazaba al norte de Puerto Rico. La tormenta provocó inundaciones, deslizamientos de tierra y vientos fuertes en las islas locales”, indicó la agencia.

“La temporada terminó más húmeda de lo normal, sobre todo debido a las bandas exteriores de Ernesto. Zonas del este y oeste de Puerto Rico volvieron a terminar con precipitaciones de 35 a más de 50 pulgadas”, agregó.

Por otra parte, el SNM precisó que, tras un comienzo seco, la sequía se disipó durante la primavera y se observaron varios episodios de precipitaciones a lo largo del año.

“La mayoría de los lugares climáticos terminaron más húmedos de lo normal, y algunos lugares de las Islas Vírgenes, el este y el interior de Puerto Rico tuvieron un exceso de precipitaciones de 16 a más de 20 pulgadas”, detalla el informe.

Según la agencia, el invierno meteorológico (diciembre de 2023 a febrero de 2024) fue en general cercano a lo normal para la mayor parte de Puerto Rico, salvo algunos focos cerca de El Yunque y el noroeste de la isla.

“Las condiciones se volvieron más húmedas cuando la estación seca llegaba a su fin en el Caribe oriental (a principios de abril), y la primavera meteorológica (marzo-mayo) terminó mucho más húmeda de lo normal. Algunas zonas cercanas a El Yunque y el oeste de Puerto Rico recogieron más de 40 pulgadas de lluvia”, reveló el SNM.

De acuerdo al informe, al final del año, la zona climática del área de San Juan recogió casi 80 pulgadas de precipitaciones, terminando como la octava más lluviosa registrada. Además, muchos municipios del este, interior y oeste recogieron más de 100 pulgadas de precipitaciones.

Otro dato que revela la agencia es que entre finales de octubre y principios de noviembre una serie de vaguadas, frentes y ondas tropicales mantuvieron un patrón meteorológico húmedo e inestable.

“Esto dio lugar a totales de precipitación estimados por radar significativamente por encima de lo normal, y las precipitaciones más intensas se produjeron en la región oriental, especialmente en el noreste de Puerto Rico, donde algunas zonas registraron hasta 26 pulgadas de lluvia. Esto representó excedentes de hasta 20 pulgadas por encima de lo normal en el noreste de Puerto Rico”, revela el informe de la agencia.

Puedes leer el informe completo aquí.