Santa Fe, Nuevo México — Las autoridades de salud pública informaron el martes sobre la expansión de un brote de sarampión en el oeste de Texas, mientras que del otro lado de los límites estatales, en Nuevo México, se confirmó una nueva infección.

El Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas ha identificado 24 casos de sarampión en relación con la aparición de síntomas dentro de las últimas dos semanas. El condado de Gaines, en el oeste de Texas, tiene una de las tasas más altas de exenciones de vacunas en el estado.

En el vecino condado de Lea, Nuevo México, los residentes fueron notificados el martes sobre una infección de sarampión en un adolescente no vacunado, además de la posible exposición de más personas a la enfermedad dentro de una sala de emergencias y un gimnasio escolar en Lovington.

“El joven de Nuevo México no había viajado recientemente ni había estado expuesto a casos conocidos del brote en Texas”, dijo el Departamento de Salud de Nuevo México en un comunicado de prensa.

Nueve de los pacientes con sarampión en Texas han sido hospitalizados. Todos los casos confirmados en el condado de Gaines involucran a residentes no vacunados.

El sarampión es un virus altamente contagioso que puede sobrevivir en el aire hasta por dos horas. Hasta nueve de cada diez personas que son susceptibles contraerán el virus en caso de quedar expuestas a la enfermedad, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés). Antes de que se introdujera la vacuna en 1963, Estados Unidos registraba entre tres millones y cuatro millones de casos al año. Ahora, generalmente son menos de 200 en un año normal.

Las autoridades de salud del condado de Gaines establecieron una clínica de vacunación la semana pasada y ofrecen servicios de detección a los residentes. El Departamento de Salud de Nuevo México anunció clínicas de vacunación sin cita previa en Hobbs, a partir de la próxima semana.

Estados Unidos registró un aumento en los casos de sarampión en 2024, incluido un brote en Chicago que enfermó a más de 60 personas.

La ley de Texas permite que los niños reciban una exención a la vacunación escolar por motivos de conciencia, incluidas creencias religiosas. El porcentaje de niños con exenciones ha aumentado durante la última década, pasando del 0.76% en 2014 al 2.32% el año pasado, según datos del Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas.