Los tornados y los vientos violentos aplastaron viviendas y destruyeron edificios desde Oklahoma hasta Indiana en la primera ronda de tormentas que además traerían lluvias récord y peligrosas inundaciones repentinas en el centro del país en los próximos días.

Al menos seis personas murieron en el oeste de Tennessee, Missouri e Indiana en la primera ola el miércoles y jueves temprano, que originó tornados poderosos, uno de los cuales lanzó escombros ligeros a casi 5 millas de altura en Arkansas.

El gobernador de Tennessee, Bill Lee, después de recorrer la devastación, dijo el jueves que era demasiado temprano para saber si había más muertes, mientras continuaban las búsquedas.

Trabajadores con bulldozer despejaron los escombros a lo largo de la carretera que cruza por Lake City, Arkansas, donde un tornado con vientos de 150 mph arrancó los techos de las casas, derrumbó paredes de ladrillo y lanzó autos a los árboles.

“No sé realmente cómo explicarlo”, dijo Cody Ferguson, quien se escondió en un refugio con sus vecinos mientras el tornado rugía sobre ellos. “Solo un estruendo muy fuerte, muchos golpes, escombros”.

Su casa, que construyó desde cero, fue demolida, y dijo que un vecino al otro lado de la calle resultó gravemente herido.

Las personas fallecidas incluyen a un hombre y su hija adolescente, cuya casa fue destruida en el oeste de Tennessee, y un hombre que murió después de que su camioneta chocara con líneas eléctricas caídas en Indiana.

Los meteorólogos advirtieron el jueves sobre un clima catastrófico por venir. Las imágenes satelitales mostraron tormentas alineadas como trenes de carga, siguiendo las mismas rutas sobre las comunidades de Arkansas, Tennessee y Kentucky, según el Centro Nacional de Predicción Meteorológica en Maryland.

El foco de la tormenta se centraba en una franja a lo largo del río Misisipi, que incluía a más de 1.3 millones de personas alrededor de Memphis, Tennessee.

Más de 90 millones de personas estaban en riesgo de clima severo, desde Texas hasta Minnesota y Maine, según el Centro de Predicción de Tormentas basado en Oklahoma.

Se esperan lluvias intensas una y otra vez en el centro de Estados Unidos hasta el sábado, lo que podría generar peligrosas inundaciones repentinas capaces de arrastrar autos. El potente sistema de tormentas traerá “inundaciones repentinas significativas y que amenazan la vida” cada día, dijo el Servicio Nacional de Meteorología (SNM).

Con más de 12 pulgadas de lluvia posibles en los próximos cuatro días, el diluvio prolongado “sucede una vez en una generación o una vez en la vida”, dijo el servicio meteorológico. “Son posibles totales e impactos históricos de lluvia”.

Equipos de rescate acuático y operaciones de apilamiento de sacos de arena se estaban preparando en toda la región, y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias estaba lista para distribuir alimentos, agua, catres y generadores.

Los rescates acuáticos ya estaban en marcha el jueves en partes inundadas de Nashville, Tennessee, donde la lluvia podría persistir durante días después de una noche inquietante de advertencias de tornados que agotaron las baterías de algunas sirenas en toda la ciudad, según el departamento de bomberos.

Los residentes del oeste de Kentucky se preparaban para cantidades históricas de lluvia e inundaciones en lugares que normalmente no se ven abrumados por el agua, dijo el gobernador Andy Beshear.

Las inundaciones repentinas son particularmente preocupantes en las zonas rurales del estado, donde las aguas pueden descender rápidamente desde las montañas hacia los valles. Hace menos de cuatro años, decenas de personas murieron en inundaciones en el este de Kentucky.

Las inundaciones extremas a lo largo del corredor que incluye Louisville, Kentucky, y Memphis, que tienen importantes centros de carga, también podrían provocar importantes retrasos en el envío y en la cadena de suministro, dijo Jonathan Porter, meteorólogo jefe de AccuWeather.

Los pronosticadores atribuyeron el clima violento a las altas temperaturas, una atmósfera inestable, fuertes cizalladuras de viento y abundante humedad que provenía del Golfo.

Bajo cielos oscuros el jueves por la mañana, los restos de un concesionario de autos usados en Selmer, Tennessee, permanecían sin techo y destrozados por la tormenta. Fragmentos de escombros se esparcían por el lote de autos y se enredaban alrededor de árboles destrozados. Algunas casas fueron niveladas hasta sus cimientos en la ciudad donde se sospecha que tres tornados tocó tierra.

“Gracias a Dios salimos sin un rasguño”, dijo Willie Barnes, quien solo tuvo tiempo de meterse en un baño con su esposa antes de que la tormenta destruyera su casa.

La Patrulla de Carreteras de Tennessee publicó un video de un rayo iluminando el cielo mientras los primeros respondedores revisaban los escombros de una casa destrozada en Selmer en la madrugada del jueves, buscando a alguien atrapado.

En el vecino Arkansas, un tornado cerca de Blytheville elevó escombros a al menos 25,000 pies, según la meteoróloga del servicio meteorológico Chelly Amin. La oficina de manejo de emergencias del estado informó daños en 22 condados por tornados, ráfagas de viento, granizo e inundaciones repentinas.

El gobernador de Mississippi dijo que al menos 60 casas fueron dañadas. En el extremo oeste de Kentucky, cuatro personas resultaron heridas mientras se refugiaban en un vehículo bajo un toldo de iglesia, según la oficina de manejo de emergencias del condado de Ballard.