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Un hombre de Maine es acusado de lanzar bombas caseras desde drones en disputa política local

Joshua Brydon, de 37 años, supuestamente tenía como objetivo personas involucradas en una disputa con un exconcejal municipal de Woodland

19 de octubre de 2024 - 9:55 PM

El sospechoso fue acusado de incendio provocado, intento de provocar un incendio, acecho, uso criminal de explosivos, y poner en peligro el bienestar de un menor. (The Associated Press)

Woodland, Maine — Un hombre utilizó explosivos caseros, algunos de los cuales lanzó desde drones, para atacar o intimidar a otras personas como parte de una disputa política en una localidad del norte de Maine, dijeron funcionarios policiales. Nadie resultó herido.

Joshua Brydon, de 37 años, compareció ante un tribunal esta semana luego de que las autoridades dijeron que detonó explosivos cerca de las casas de varias personas con artefactos que creó usando fuegos artificiales, tanques de gas propano y otros materiales, según expedientes judiciales. Una de las explosiones fue lo suficientemente fuerte como para tirar objetos de una pared en una vivienda, y varios de los explosivos fueron lanzados por drones operados por Brydon, indican los documentos.

Brydon supuestamente tenía como objetivo personas involucradas en una disputa con un exconcejal municipal de Woodland o con su suegro, el supervisor de caminos local.

Su abogado no respondió de momento a un mensaje telefónico en el que se pedían sus comentarios.

Brydon, quien fue detenido el 12 de octubre, fue acusado de incendio provocado, intento de provocar un incendio, acecho, uso criminal de explosivos, y poner en peligro el bienestar de un menor, de acuerdo con los expedientes judiciales. También fue acusado, en un caso separado, de poseer armas de fuego sin permiso, dijeron funcionarios.

Brydon fue dejado en libertad cuando su fianza se redujo de $100,000 en efectivo a $25,000, con estipulaciones que incluían mantenerse alejado de las víctimas.

El hombre fue detenido tras una investigación de 18 meses durante la cual se incautaron drones y materiales que podían ser utilizados para la fabricación de explosivos caseros, según los expedientes judiciales. El FBI, la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, y el Departamento de Seguridad Nacional ayudaron a los bomberos y a la policía locales con la investigación.

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