El Kremlin confirmó el lunes que el presidente ruso, Vladimir Putin, le regaló al expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, un retrato que él mismo encargó del mandatario estadounidense.

Putin entregó la pintura al enviado especial de Trump, Steve Witkoff, en Moscú a principios de este mes, según informó el portavoz del presidente ruso, Dmitry Peskov, en respuesta a una pregunta de un periodista, declinando hacer más comentarios.

El obsequio fue mencionado por primera vez la semana pasada por Witkoff en una entrevista con el ex presentador de Fox News, Tucker Carlson. Witkoff le dijo a Carlson que Trump “estaba claramente emocionado” con el retrato, el cual describió como “hermoso”.

Witkoff se reunió con Putin después de conversaciones con funcionarios rusos sobre los esfuerzos para poner fin a la guerra en Ucrania. Las conversaciones sobre un alto al fuego continuaron el lunes en Arabia Saudita, donde funcionarios estadounidenses se reunieron con sus homólogos rusos, un día después de haberse reunido con los negociadores ucranianos.

Durante su entrevista con Carlson, Witkoff describió el regalo de Putin como “gracioso” y recordó cómo Putin le dijo que había orado por Trump el año pasado cuando se enteró de que el entonces candidato a la presidencia de los EE. UU. había sido baleado en un mitin en Pensilvania. “Él estaba orando por su amigo”, relató Witkoff, al recordar los comentarios de Putin.

En 2018, Putin le dio al entonces presidente Trump un balón de fútbol que el Servicio Secreto había revisado en busca de dispositivos de escucha antes de que Trump se lo regalara a su hijo, una precaución que hacía eco de un obsequio de la época soviética a un diplomático estadounidense que resultó estar intervenido.

En 1945, un niño soviético le dio como regalo al entonces embajador de los EE. UU., Averell Harriman, una talla del Gran Sello de los Estados Unidos. Esta pieza colgó en su oficina durante seis años, permitiendo a la Unión Soviética escuchar sus conversaciones, hasta que el Departamento de Estado descubrió que contenía un dispositivo de escucha encubierto.

No se supo de inmediato si el retrato que Putin le regaló a Trump fue examinado en busca de micrófonos. La Casa Blanca no ha comentado sobre el retrato.

Trump no es el primer presidente en ejercicio en recibir un regalo de Putin. En 2021, Putin le dio al entonces presidente Joe Biden una caja de escritura y pluma lacadas de $12,000 cuando se reunieron en una cumbre en Ginebra, Suiza. En 2013, según se informó, envió al entonces presidente Barack Obama platos de porcelana y tazas de espresso.

Aparentemente, este no es el primer retrato de un líder estadounidense que Putin ha enviado. En 2014, el presidente ruso envió al expresidente George H.W. Bush un retrato del exmandatario para su 90 cumpleaños.