El sentido de impotencia, indignación y coraje se ha apoderado de los alcaldes -populares y novoprogresistas- ante la lenta e ineficiente respuesta del consorcio LUMA Energy para restablecer el servicio energético tras el paso de la tormenta tropical Ernesto por la isla.

Un grupo de alcaldes entrevistados por El Nuevo Día denunció que, a cinco días del paso del fenómeno atmosférico, son escasas las brigadas de LUMA Energy laborando en sus respectivos municipios. Aseguraron que la empresa -que desde el 2022 mantiene una Alianza Público Privada (APP) con el gobierno para la transmisión y distribución de energía- carece de personal y no cuenta con el peritaje para trabajar con celeridad.

Señalaron, además, que pese a la incompetencia y la falta de comunicación, no hay fiscalización ni consecuencias por parte del gobierno.

Uno de los alcaldes que expresó su molestia con el trabajo de LUMA tras el paso de la tormenta fue el alcalde de Coamo, Juan Carlos García Padilla. El ejecutivo municipal acusó a Quanta Services -matriz de LUMA Energy-, de “robarse el dinero”.

“Por más que uno trata de compenetrarse con el sistema de respuesta, no hay manera de hacerlo porque tienen un sistema que no funciona. Especialmente las brigadas de Quanta. Esa gente se está robando el dinero porque una brigada de Quanta con dos grúas y tres camiones canasta, que en cada uno debe haber un celador o dos, para tardarse todo un día para cambiar un poste, es robarse el dinero”, sentenció el alcalde.

“De verdad no están preparados. Te lo juro por mi santa madre, que está muerta. No están listos y la coordinación de los trabajos no es la mejor. Está muy centralizada la operación. No permiten que los supervisores en el field (campo) actúen rápido. No hay problema con documentarlo (el trabajo), pero no pueden hacer esperar a la gente”, agregó el alcalde, cuyo pueblo tiene 20 sectores sin luz.

García Padilla recalcó que LUMA Energy no está preparada para afrontar y auxiliar a los puertorriqueños en caso de un huracán, cuya temporada se extiende hasta el 30 de noviembre.

¿Qué harán los alcaldes si viene un huracán?, cuestionó este rotativo.

“Pedirle a Dios que no venga uno porque no están listos. Los americanos no le ponen un pie a los nuestros. Deben contratar a los celadores nuestros y las brigadas nuestras. Si viene un huracán, nos vas a ver trabajando a todos los alcaldes levantando líneas porque ellos no tienen la capacidad”, advirtió García Padilla.

“Yo no sé quién (respiró) firmó ese contrato. A ese Fermín (Fontánez, director de la Autoridad de las Alianzas Público Privadas), deben radicarle cargos... discutir públicamente cláusula por cláusula de ese contrato. No es posible que estemos maniatados y el país esté así”, cuestionó el alcalde.

El gobernador Pedro Pierliuisi, por su parte, defendió este lunes la gestión de LUMA Energy en su respuesta a las averías provocadas por el paso cercano de la tormenta Ernesto. Aseguró comprender el enojo de varios alcaldes, algunos de los cuales han avisado sobre su intención de emplear brigadas propias para reparar parte de la infraestructura energética afectada en sus pueblos.

A juicio del gobernador, la movilización de LUMA es “excelente”, según dijo en un aparte con la prensa este lunes tras salir de una visita a una escuela en Aibonito como parte del regreso a clases.

“Tengo que reconocer que la respuesta fue rápida. En cuestión de tres días, el 96% de la población tenía el servicio eléctrico y en dos días era más del 90%. Siempre va a haber críticas. Estamos en año electoral y eso lleva a que haya más protagonismo de la cuenta, y que vengan las críticas a veces injustas, pero no importa. Lo importante es que el 96% de la población está cubierta con servicio energético y de agua”, dijo.

García Padilla, sin embargo, aseguró que la incomodidad con la respuesta de LUMA no ha escalado “porque en San Juan hay luz y en Bayamón”.

Otro de los alcaldes que expresó su disgusto con el servicio de LUMA fue el alcalde de Orocovis, Jesús Colón Berlingeri. Dijo que aunque personal de LUMA Energy se reunió con ellos y les detalló su plan para atender emergencias, “es muy bello en el papel, pero en la ejecución eso no funciona y no funcionó”. Al momento de la entrevista, Orocovis tenía 8,600 personas sin servicio eléctrico.

“La conversación hasta ayer era bien vaga, liviana, sin sustancia. No dejan saber cuál es el daño, dónde van a estar ni qué van a hacer. Es algo que la gente nos reclama, y quien único tiene la contestación son ellos”, dijo, por su parte, el alcalde de Orocovis, quien optó por contratar brigadas privadas para restablecer la luz, pero destacó que eso tiene un costo para el ayuntamiento.

El alcalde de Camuy y presidente de la Federación de Alcaldes, Gabriel Hernández, sostuvo, en tanto, que lleva tiempo sugiriendo que se use un “coordinador de seguridad” por municipio que sirva de enlace.

“En las reuniones la hemos pedido, nos escuchan, pero no actúan. Esa figura es vital, uno por cada municipio porque no es lo mismo un director regional a cargo de varios municipios”, afirmó Hernández, quien detalló que al momento el municipio tiene 30 residencias sin luz.

Los alcaldes de Vieques, Río Grande y Luquillo se quejaron de la poca o ninguna comunicación con la encargada de la transmisión y distribución de energía.

“Si mandan más personal, claro que sí se acelera. Tenemos como seis (brigadas) de la isla grande y cinco locales y no son suficientes”, afirmó el alcalde de Vieques, José A. “Junito” Corcino, en cuyo pueblo hay problemas con líneas soterradas que mantiene sin luz a la parte este de la Isla Nena.

En cambio, el alcalde de Luquillo, Jesús “Jerry” Márquez, señaló que tuvo que recurrir a los medios de comunicación para poder lograr comunicación y acción de Luma.

“Ahora hay muchas brigadas, pero la mayoría no son de aquí y no conocen el área, las subestaciones. Lo único que nos queda son los medios”, dijo Márquez con cuyas expresiones concurrió su homólogo de Río Grande, Ángel “Bori” González. “Hay falta de personal. Han traído compañías americanas que están muy lentas”, agregó González.

Destacó que con la falta de luz, tampoco hay agua en algunos sectores de su pueblo.

“Ahora mismo estamos 40% (de los riograndeños) sin agua”, dijo.

Con este cuadro, el alcalde de Orocovis urgió al diálogo.

“Nos tenemos que sentar en la mesa a hacer un esfuerzo conjunto cuando tengamos situaciones de emergencia donde los municipios tengamos un rol con Luma. Si no se hace esto, en una futura situación, en un huracán vamos a sufrir, y lo peor es que quien sufre son los más necesitados”, advirtió.

Aunque se solicitó, LUMA Energy no concedió entrevista.