El director ejecutivo de la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3), Manuel Laboy, afirmó este martes que los cambios que GeneraPR introdujo al proyecto de compra de nuevas unidades de respuesta rápida (“peaking units”) respondieron a un ajuste –notificado en enero de 2023– a las políticas de aprobación de fondos por parte de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA), pero reconoció que el aumento en costos registrado desde entonces limitará el campo de acción para ejecutar otras obras.

Por ello, advirtió que corresponde a la empresa agilizar los trámites para evitar un retraso aún mayor en la instalación del equipo.

Según Laboy, en enero del año pasado, FEMA estimó en $7,600 millones las labores de mitigación de riesgos que se requerirían en la infraestructura eléctrica del país. Al realizar un estimado global del costo de los trabajos, la agencia federal indicó que los proyectos podrían financiarse, indistintamente, bajo las secciones 404 o 406 de la Ley federal Stafford, que proveen, precisamente, para trabajos que reduzcan los riesgos ante fenómenos naturales futuros, explicó el funcionario.

Ante esa notificación, el COR3, en conjunto con la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), GeneraPR y LUMA Energy, optó por mover la mayoría de los proyectos formulados bajo la sección 404 –como el de las unidades pico– a la sección 406, para mantener una mayor flexibilidad para obras de reconstrucción en otros sectores. Por disposición federal, la asignación de fondos al amparo de la 404 enfrenta un tope de $4,000 millones entre todas las agencias subrecipientes, de los cuales el 75% proviene de FEMA y, el pareo restante de la Subvención en Bloque para Desarrollo Comunitario tras Desastres (CDBG-DR).

Bajo la 406, “hay más presupuesto, en general, y podemos absorber aumentos de costo”, resaltó el titular de COR3.

“Bajo la 404, absorber esos aumentos es limitado, porque tengo otros proyectos de mitigación, (como los) de los municipios, los de (la Autoridad) de Acueductos (y Alcantarillados), todo el mundo. En el 406, tengo $7,600 millones –un presupuesto mucho más amplio– para el sistema eléctrico”, abundó Laboy en entrevista con El Nuevo Día.

Los fondos de mitigación disponibles para atender necesidades de la red eléctrica son adicionales a los $10,500 millones autorizados por FEMA en septiembre de 2020.

Ante ese escenario, GeneraPR, tras asumir el control de la flota generatriz del país, en julio de 2023, modificó el trámite que había encaminado la AEE para comprar 11 “peaking units”, que son las unidades de generación más pequeñas del sistema y se activan cuando se producen picos de demanda eléctrica o cuando fallan las plantas principales, con el objetivo de mitigar los relevos de carga.

Aunque, en aquel entonces, el operador proyectó que –tras los cambios al proceso– podría adjudicar el requerimiento de propuestas (RFP) para diciembre de 2023, a un costo cercano a los $800 millones, y tener en operación las unidades a finales de 2025, en una moción reciente al Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR) informó que el nuevo costo estimado asciende a $911 millones y que las máquinas entrarían en función en 2027, según reportó este diario el lunes.

Bajo el RFP de la AEE, que se debió haber adjudicado en verano de 2023 –coincidiendo con la transición a GeneraPR–, las unidades de respuesta rápida habrían comenzado a operar a mediados de 2025.

“Pienso que, basado en los parámetros que se incluyeron en el RFP de la AEE, bajo esos supuestos, como las especificaciones y estrategias de mitigación, era una expectativa razonable. Siempre tiene riesgos, bajo la AEE o cualquiera, de que se atrase por factores ajenos. En el caso de Genera, ellos decidieron, y consultaron con el NEPR, unos cambios a la estrategia de licitación y ciertos aspectos técnicos a las especificaciones de los equipos. Al hacer un cambio, eso altera la línea de tiempo” aceptó Laboy.

En términos de ejecución, dijo que, en las reuniones que ha sostenido, “tanto internas con Genera y FEMA, como con la secretaria de Energía federal (Jennifer Granholm), se les ha recordado la importancia de acelerar estos procesos”.

“Se entienden los cambios que ocurrieron por estrategia de licitación y aspectos técnicos (…), pero se ha enfatizado en la necesidad, y se le ha dicho, que tienen que acelerar los procesos de licitación, contratación y órdenes de compra”, agregó el ingeniero, al subrayar que, tanto GeneraPR como LUMA Energy tienen acceso a capital para adelantar trabajos de diseño y compra de equipo antes que FEMA comprometa los fondos para un proyecto particular.

El funcionario, asimismo, reconoció que, de materializarse el aumento en costos previsto por GeneraPR, la AEE tendría que desembolsar cerca de $11 millones adicionales correspondientes al pareo de 10%, al tiempo que se reduciría la partida disponible bajo los fondos 406 de la AEE.

“Ese aumento de los ‘peakers’ se está comiendo más del presupuesto, porque es finito. Eso nos pone en una posición de ver qué otros proyectos se pueden afectar”, señaló Laboy, al puntualizar que la Junta de Supervisión Fiscal es consciente de la importancia de aprobar suficientes fondos para el pareo estatal.

El director del COR3 describió la adquisición de las “peakers” como uno de los cuatro proyectos más importantes para la confiabilidad a mediano plazo del sistema energético, junto a la instalación de baterías de almacenamiento, el despeje de vegetación del tendido eléctrico y la adquisición de generadores temporales.

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¿Qué son las “peakers”?