Noticia
Basado en hechos que el periodista haya observado y verificado de primera mano, o en información verificada que proviene de fuentes bien informadas.

Cable eléctrico submarino de Puerto Rico a República Dominicana estaría atado a la construcción de dos plantas nuevas

El Departamento de Energía de Estados Unidos evalúa el impacto ambiental que tendría el proyecto

5 de febrero de 2025 - 1:36 PM

Rafael Vélez Domínguez y Tirso Selman, socios de CTDC, proyectan comenzar en 2026 la compra de materiales para el desarrollo del cable submarino. (Vanessa Serra Díaz)

Para viabilizar el desarrollo del cable eléctrico entre Puerto Rico y la República Dominicana, la empresa proponente impulsa, paralelamente, el desarrollo de dos instalaciones de generación en el vecino país, incluyendo una finca solar y una planta de producción mediante la quema de gas natural, trascendió el martes en la primera vista pública citada por el Departamento de Energía de Estados Unidos (DOE) para analizar el impacto ambiental del proyecto.

Tirso Selman, gerente de proyectos de Caribbean Transmission Development Company (CTDC), precisó que la instalación fotovoltaica al este de la República Dominicana produciría 200 megavatios (MW), lo que la convertiría en la finca solar “más grande del Caribe”. El proyecto iría acompañado de una planta de ciclo combinado de gas natural que, más adelante, podría también utilizar hidrógeno verde, un modelo similar al que se propone para la central Energiza en San Juan, anunciada en diciembre pasado.

“La planta se construiría paralelamente al desarrollo del Proyecto Hostos para garantizar que se alineen las entradas en operación de ambos proyectos. La planta en Dominicana que alimentaría el Proyecto Hostos estaría dedicada exclusivamente a Puerto Rico. Una de las manufactureras de generatrices consultadas por CTDC estima que la planta produciría 3.8 millones de toneladas menos de CO₂ (dióxido de carbono) menos que las plantas existentes en Puerto Rico”, afirmó el ingeniero, socio de Rafael Vélez Domínguez, presidente de CTDC.

El cable submarino del Proyecto Hostos –como CTDC ha bautizado la iniciativa de conectar energéticamente los dos países– transmitiría hasta 700 MW en ambas direcciones, si bien Selman anticipó que, en un inicio, el flujo sería de la República Dominicana a Puerto Rico.

“Cuando Puerto Rico cuente con más capacidad de generación eléctrica, podría vender electricidad (a la República Dominicana) si así lo desea”, subrayó Selman en la vista virtual. En entrevista previa con El Nuevo Día, Vélez Domínguez y Selman proyectaron que, a largo plazo, Puerto Rico podría alimentarse del cable submarino en horario nocturno, cuando registra sus picos de consumo, mientras que la República Dominicana haría lo propio durante el día, coincidiendo con el aumento en la demanda industrial.

Actualmente, la propuesta del cable se encuentra tramitando un permiso presidencial a nivel federal, cuya evaluación dirige el DOE. Según Selman, de obtenerse la autorización del gobierno estadounidense y los correspondientes permisos en la República Dominicana y Puerto Rico, CTDC comenzaría la adquisición de materiales a inicios de 2026, con miras a comenzar la construcción al año siguiente y finalizar en 2030.

El cable, entonces, entraría en servicio el 1 de enero de 2031 y, según Selman, tendría la capacidad de reiniciar el servicio eléctrico luego de apagones masivos.

En la audiencia, Selman abundó sobre elementos técnicos del desarrollo propuesto de la línea de transmisión, que tendría una extensión de 145 kilómetros (90 millas) y cuya ruta buscaría evitar zonas catalogadas como humedales: “Si en el diseño no se pueden evitar los humedales, obtendríamos los permisos necesarios del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos (USACE)”.

El ingeniero, a su vez, describió el mantenimiento del cable –que en Puerto Rico tocaría tierra en el puerto de Mayagüez– como similar al que reciben las seis conexiones de telecomunicaciones de fibra óptica que cruzan el canal de La Mona.

“El riesgo de fallas es muy bajo”, afirmó Selman, detallando que el depósito del cable –una vez construido en el lecho marino– tomaría apenas unas tres semanas, y se realizaría mediante un submarino controlado de manera remota y acompañado por un barco “especializado”.

El trámite que dirige al presente el DOE busca determinar, en primer lugar, si una evaluación ambiental es adecuada para el nivel de impacto del proyecto, o si se requiere que CTDC prepare una declaración de impacto ambiental, un análisis más a fondo, conforme a las disposiciones de la Ley Nacional de Protección Ambiental (NEPA). Bryan Palacio, designado por el DOE como director de NEPA para el Proyecto Hostos, precisó que el Servicio de Pesca y Vida Silvestre, el USACE y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) colaboran en las evaluaciones.

En la vista, que se extendió por cerca de 40 minutos, Palacio respondió a nueve preguntas del público sometidas por escrito al portal del DOE, aunque aclaró que se recibió una cantidad mayor de interrogantes y comentarios. Según el científico, el cable submarino solo recibirá la autorización del DOE si se concluye que tendrá un efecto positivo sobre la “confiabilidad” del sistema eléctrico y que no tendrá impactos ambientales mayores.

El DOE citó a una segunda vista pública virtual que tendrá lugar el miércoles, a las 6:00 p.m. hora de Puerto Rico.

Popular en la Comunidad


Ups...

Nuestro sitio no es visible desde este navegador.

Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: