El Municipio de Barranquitas tendrá un ocupado 2022 en lo que concierne a la reconstrucción tras la devastación provocada por el huracán María con, entre otras cosas, la apertura de una escuela de Bellas Artes.

Sin embargo, la posibilidad de que el gobierno estatal traspase la titularidad del antiguo Hotel Barranquitas representaría el acierto económico más poderoso en el futuro cercano del municipio, indicó su alcalde, Elliot Colón.

La iniciativa, de concretarse, sería viable a través de una alianza público-privada.

El hotel, de unas 60 habitaciones, es propiedad del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos y permanece abandonado desde el huracán María, en 2017, luego que el programa Job Corps lo abandonara. Colón presentó hace cinco meses una solicitud al Comité de Evaluación y Disposición de Bienes Inmuebles para que ese organismo, que no objeta la petición, traspase al gobierno municipal la titularidad de la estructura y las 12.5 cuerdas donde se ubica.

“Hay varias personas que han hecho acercamientos como inversionistas, pero estamos esperando por la titularidad”, dijo Colón en entrevista con El Nuevo Día.

El alcalde indicó que ha recibido propuestas, tanto para desarrollar una escuela como un hotel. Él favorece la segunda opción.

“Sería un desarrollo muy importante, no solamente para Barranquitas, sino para toda la zona central. Por ejemplo, Orocovis tiene Toro Verde, pero no tiene hotel, y la asistencia a esa instalación es grande durante la semana, y sería un atractivo enorme tener un hotel cerca en Barranquitas”, dijo.

Los patronos privados más importantes de este municipio montañoso son el recinto local de la Universidad Interamericana y el Centro de Salud Integral de la Montaña.

Colón tiene dos proyectos importantes para el casco urbano: la escuela de Bellas Artes y una iniciativa para repoblarlo.

El alcalde indicó que las entrevistas para la contratación de los maestros que impartirán clases en la escuela ya comenzaron y espera que, en enero, se reciban los primeros estudiantes, que tomarán cursos luego del horario escolar en materias como danza y dibujo. La institución estará ubicada en un edificio localizado frente a la plaza pública y que fuera sede del antiguo casino y de una sucursal del Banco Popular.

El dinero para costear la escuela de Bellas Artes saldrá de fondos municipales, y Colón indicó que tiene el financiamiento asegurado a largo plazo.

En el mismo casco urbano, con fondos federales para el desarrollo comunitario (CDBG, en inglés), el gobierno municipal comprará dos edificios vacíos e intentará adquirir un tercero para convertirlos todos en apartamentos. El proyecto tiene un costo estimado de $9.6 millones.

“Vamos a hacer residencias y también vamos a hacer estacionamientos”, dijo Colón, al explicar que uno de los edificios está ocupado actualmente por un negocio cuyos propietarios están interesados en venderlo, por lo que resta la negociación con los titulares.

El plan es habilitar unos 30 apartamentos, pero todavía se desconoce si serían vendidos o alquilados.

“Queremos traer gente al pueblo, para que viva acá”, enfatizó.

Colón espera que, antes que finalice el 2022, esté listo para ser utilizado el estadio Pablo Marrero. Se trata de una estructura cuya construcción arrancó antes del huracán María, pero un litigio con la empresa desarrolladora atrasó los trabajos. El estadio, cuya construcción fue costeada con fondos municipales, será la sede del equipo de los Próceres de Barranquitas, del béisbol Doble A.

Otras instalaciones deportivas que sufrieron daños tras el paso de María serán rehabilitadas con fondos de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés), como la cancha bajo techo Juan Carlos Berríos, múltiples parques y canchas de menor escala, la piscina municipal y las canchas de tenis y la pista atlética en el complejo deportivo. Toda la obra supera los $3 millones.

El gobierno municipal tiene un agresivo programa deportivo, destacó el mandatario municipal, ya que se ofrecen clínicas de voleibol, tenis de mesa y baloncesto. Además, se imparten clases de zumba para adultos y se dan clases de natación.

Colón destacó que un barranquiteño, Héctor Pagán, logró la medalla de oro recientemente en el evento de los 10,000 metros en los Juegos Panamericanos Junior, en Cali, Colombia.

En cuanto a las vías de rodaje, el trabajo principal con fondos de FEMA consiste en la reparación de un puente en la carretera PR-770, donde el gobierno colocó uno provisional. El trabajo cuesta $4 millones, y los trabajos deben comenzar en marzo.

También el año que viene, dijo Colón, se reparará un puente en la PR-772. La obra requiere la expropiación de unos terrenos y ya se identificó el dinero federal para ese cometido, aseguró.

Sin embargo, la vía principal hacia Barranquitas sigue siendo la carretera PR-143, donde hubo un dramático deslizamiento a causa del huracán. Colón dijo que espera que el trabajo sea completado para julio del 2022.

“Esa obra es importante porque esa es la ruta del chinchorreo, que le da vida a los comerciantes pequeños, y el deslizamiento provoca que se utilicen carreteras municipales, que son más pequeñas”, dijo.