30 de enero de 2025 - 11:01 AM
Actualizado el 30 de enero de 2025 - 5:21 PM
La Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico (UPR) pospuso para el mes que viene la discusión sobre el futuro de Luis A. Ferrao Delgado como presidente del sistema universitario, tras aprobar una moción para que la discusión sobre su futuro se dé el 20 de febrero.
El representante estudiantil subgraduado ante la Junta de Gobierno, Daniel Fernández González, presentó una moción para que el cuerpo rector retirara la confianza a Ferrao Delgado.
Acto seguido, el presidente de la Junta de Gobierno, Ricardo Dalmau Santana, presentó una enmienda para que se posponga la votación sobre la moción hasta el 20 de febrero. Asimismo, se le ordenó al Comité Especial para Evaluación del Presidente terminar en o antes del 20 de febrero el informe que debe completar sobre el desempeño de Ferrao Delgado durante los dos años que ha estado al mando.
“Los estudiantes entendemos que la Universidad de Puerto Rico tiene que pasar por un proceso de transformación, es inevitable. Sabemos que los estudiantes de ahora no son los mismos de hace 10, 20 o 30 años. Eso es inevitable, y nosotros nunca nos hemos cerrado a ideas, pero tiene que ser una evaluación que se haga en consulta con la comunidad universitaria”, expresó Fernández González, previo a presentar la moción de destitución.
Ferrao Delgado ha estado al centro de múltiples controversias hace varias semanas, luego que el 13 de enero emitiera una directriz en la cual ordenó la paralización inmediata de admisiones a 64 programas de grado asociado y bachillerato que, por tres años consecutivos, han matriculado 10 o menos estudiantes de nuevo ingreso. Pospuso la entrada en vigor de la paralización el 24 de enero.
Fernández González lamentó que la comunidad universitaria se haya enterado de las directrices y acciones del presidente universitario a través de “filtraciones” y no de medios oficiales internos de la UPR. No obstante, Ferrao Delgado argumentó que las normativas que rigen las operaciones de la UPR, así como sus acreditaciones, delinean el campo de acción que tiene el presidente y que la Junta de Gobierno no puede interferir en las operaciones del día a día.
“No puedo enviar cada carta que escribo”, expresó.
Los representantes de los sectores estudiantiles y claustrales ante la Junta Universitaria de la UPR reclamaron a la Junta de Gobierno, desde el miércoles, la destitución de Ferrao Delgado por lo que consideran ha sido una “gestión desacertada” y que genera inestabilidad.
“La comunidad universitaria le exige a la Junta de Gobierno la salida de esta administración universitaria. Sus miembros conocen la realidad de la UPR y han sido testigos de las irregularidades del doctor Ferrao. El tiempo de la supuesta objetividad ha terminado”, expresaron los representantes estudiantiles y claustrales en un comunicado de prensa.
El descontento entre sectores universitarios con la gestión de Ferrao Delgado aumentó luego que trascendiera un informe de la Oficina de Auditoría Interna de la UPR que señala que violentó reglamentos institucionales al autorizar el traslado de cuatro empleados asignados a los recintos de Río Piedras y Mayagüez a puestos de carrera en la Administración Central.
Ferrao Delgado, por su parte, ha asegurado que sí cumplió con los pasos establecidos por el Reglamento General de la UPR y la Ley de la UPR, y la directora de la Oficina de Asuntos Legales, Edith González, emitió una carta en la cual señala que el presidente “está facultado a nombrar o contratar el personal técnico y administrativo de su oficina”.
Asimismo, esta semana trascendió una misiva, con fecha del 15 de enero y dirigida a la agencia acreditadora Middle States Commission on Higher Education, en la que Ferrao Delgado –quien ha asegurado en múltiples ocasiones que no dará paso al cierre de recintos– informa que iniciarán, “durante este semestre, un proceso para evaluar la sostenibilidad financiera del sistema de 11 recintos de la UPR”.
El presidente universitario sostuvo que la directriz a los rectores para evaluar los programas de bachillerato y grado asociado de bajo desempeño, así como la carta a Middle States, han sido acciones necesarias para atender los retos actuales y futuros del sistema.
Ferrao Delgado citó un informe del Banco de la Reserva Federal de Filadelfia, publicado en diciembre, que establece un modelo para predecir el cierre de universidades en Estados Unidos. El análisis establece que el cierre de instituciones de educación aumentará en los próximos años debido a lo que llaman el “precipicio demográfico”, que a su vez es uno de los principales indicadores de riesgo y da paso a problemas financieros. El modelo que desarrollaron se basa en un escenario de una reducción en matrícula de 15% entre 2025 y 2029, y cómo se multiplica el riesgo de cierre si esa baja es abrupta en un solo año o si se diluye a lo largo del periodo de cuatro años.
Ferrao Delgado señaló que las proyecciones de su administración apuntan a que la reducción de la matrícula en la UPR será de 25% a lo largo de cuatro años. Datos provistos por la UPR previamente a El Nuevo Día proyectan que la matrícula bajará de 41,922 estudiantes a 31,271, de 2024 a 2028.
“Para evitar ese resultado para la Universidad de Puerto Rico, la Universidad de Puerto Rico tiene que evaluar su sostenibilidad y proponer alternativas viables de su oferta académica y de su sistema”, manifestó.
Del mismo modo, indicó que la carta enviada a Middle States responde a una directriz de la propia agencia acreditadora que requirió ser informada sobre las medidas que tomen o que piensen tomar las instituciones para manejar sus retos financieros o de matrícula.
“Esa es una de las razones (por las) que nosotros hemos hecho lo que responsablemente tenemos que hacer”, expresó. “Hay que tomar una decisión. Propusimos unas, hay que hacerlas. Yo sé que son dolorosas, yo sé que es difícil tomar (las decisiones), pero los datos están ahí”, agregó.
El presidente reiteró que datos de College Board revelan que los intereses de los jóvenes de escuela superior respaldan la necesidad de evaluar la oferta académica de la UPR. Apenas el 2% de los estudiantes que se graduaron de escuela superior, en 2023, expresaron interés en proseguir estudios en Humanidades y Educación, de acuerdo con el Perfil de la clase graduanda 2023 de College Board.
“Yo creo que hay que accionar; obviamente, son decisiones difíciles. Se plantearon (alternativas), obviamente la comunidad entiende que se le debió haber dicho de esta u otra forma, pero hace años que esta realidad está. Hace años que la Universidad tenía que tomar unas acciones, no se han tomado, y queremos incitar a que se tomen. De no tomarse, las consecuencias van a ser peores, y no lo vamos a ver nosotros”, expresó Ferrao Delgado, al mencionar que el resultado será “una Universidad completamente distinta a la que conocimos”.
Cientos de personas participaron el miércoles en una manifestación, desde el recinto de Río Piedras hasta la sede de la Administración Central de la UPR, para rechazar las gestiones de la administración universitaria.
“Su administración se ha caracterizado por una toma de decisiones unilateral, sin la debida participación de los sectores universitarios, generando desconfianza y descontento generalizado”, establecieron los representantes estudiantiles ante la Junta Universitaria en una carta enviada el miércoles al presidente de la Junta de Gobierno.
Los estudiantes y profesores que son parte de la Junta Universitaria enumeraron una serie de situaciones que, a su entender, evidencian que, “en el momento más crítico de su historia, la UPR tiene el peor liderazgo posible”. Entre ellos, detallan que hay preocupación con los estados financieros de la institución ante la designación de cuatro directores de Finanzas en dos años, así como el hecho que la UPR opera con “un presupuesto descuadrado” certificado por la Junta de Supervisión Fiscal.
Del mismo modo, denunciaron que la administración del presidente “se caracteriza por la improvisación” y “beneficia a sus allegados con traslados y aumentos salariales irregulares”.
“Estos son solo algunos ejemplos de la gestión desacertada del doctor Ferrao. Sin duda alguna, conduce la Universidad hacia la inestabilidad, con la complicidad de la Junta de Gobierno, que permite y justifica estas acciones en nombre de una falsa estabilidad. ¡Basta ya!”, manifestaron estudiantes y profesores.
Varios de los Consejos Generales de Estudiantes han exigido la renuncia de Ferrao Delgado o su destitución en los últimos días, entre ellos, los de Mayagüez y Ciencias Médicas. Expresiones similares han realizado los Senados Académicos de Río Piedras y Aguadilla.
“Hacemos un llamado directo al presidente de la Junta de Gobierno, CPA Ricardo Dalmau Santana: ¿Hasta cuándo permitirá este desastre? ¿Tomará las decisiones necesarias para salvar la UPR o se quedará de brazos cruzados mientras la institución colapsa? Posponer decisiones importantes, cuando la evidencia es tan tangible, puede interpretarse como fallar al verdadero deber: proteger la Universidad de Puerto Rico”, expresaron los representantes ante la Junta Universitaria.
“No actuar es ser cómplice de los abusos y de la mala administración que está destruyendo la UPR. La comunidad universitaria lo observa. Está en sus manos ponerse del lado correcto de la historia”, añadieron.
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