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Ante la posibilidad de que, en las próximas horas, Puerto Rico experimente condiciones de tormenta, el alcalde de San Juan, Miguel Romero, ordenó este lunes la apertura, a partir de mañana al mediodía, de dos refugios dirigidos a los pacientes encamados y las personas sin hogar.

Mientras, informó la cancelación de las clases en el sistema educativo de la capital, que justo comenzó este lunes el nuevo año escolar. “Este es un sistema que estábamos vigilando desde temprano y la semana pasada comenzamos con un plan de mitigación en las comunidades vulnerables”, expresó el ejecutivo municipal durante conferencia de prensa desde el Centro de Operaciones Municipales (COE).

Dijo que desde el pasado 5 de agosto, brigadas municipales limpiaron las quebradas de las comunidades de Villa Nevares y Cantera, así como los sistemas de alcantarillados, y realizaron trabajos de recogido de escombros.

Una sala del Centro de Diagnóstico y Tratamiento de Hoare, dijo, servirá de refugio para los pacientes encamados cuya vida depende de equipo médico. Mientras, las personas sin hogar serán ubicado en el centro comunal de Buen Consejo. Este ultimo tiene capacidad para 50 personas.

Romero, agregó, que analiza la posibilidad -junto al gobierno estatal- de habilitar dos refugios adicionales, en las escuelas Juan Ponce de Léon y Ernesto Ramos Antonini, localizadas en las zonas de San José y Barrio Obrero, respectivamente. “Ambas son comunidades susceptibles a inundación”, expresó al señalar que se han extendido los horarios de trabajo de los primeros respondedores.

“Si hay alguien que por preocupación, porque el área donde reside es propensa a inundación, quiere trasladarse a un refugio, puede hacerlo en el día de mañana (martes)”, subrayó.

Anticipó, asimismo, la activación de la cocina de coliseo Roberto Clemente, desde donde se pueden producir unas 9,000 comidas calientes. “Para nosotros, a nivel municipal, lo más importante son los esfuerzos que estamos haciendo de mitigación para, en la medida que podamos… atender todas las comunidades que son susceptibles a inundaciones”, expuso.

Romero dijo que esta tarde realizará un recorrido para inspeccionar los sistemas de bombas administrados por el Departamento de Recursos Naturales (DRNA), los cuales históricamente han confrontado problemas durante eventos de mucha lluvia.

Entre las estaciones que administra el gobierno estatal está la de la avenida Baldorioty de Castro, la Parada 22 y la Parada 18, en San Juan. “Quiero asegurarme que están funcionando y que tienen todo lo que necesitan para minimizar el riesgo a inundación, en cuanto a pueda ser minimizado. Va a depender de la magnitud de las aguas que recibamos”, expuso.

Tan reciente como ayer, domingo, un área de Ocean Park, en Condado, se inundó como resultado de unas lluvias que cayeron sobre la zona, pero el alcalde sostuvo que la situación se debió a que una bolsa de basura estaba obstruyendo una alcantarilla. “Una vez se removió, la información que tengo es que bajó (el agua)... en los últimos eventos que hemos tenido la experiencia ha sido que (las bombas) han estado funcionando, así que esperamos que sea lo mismo”, expresó.

Las casas bombas fueron construidas para el control de inundaciones, por lo que ubican en o cerca de zonas anegables o propensas a estar bajo agua. Cuentan con un sistema que descarga a lagunas o directamente al mar las aguas de escorrentía, a través de canales o tuberías.

En cuanto a las estaciones de bomba operadas por el Municipio, localizadas en Puerto Nuevo, la avenida Rexach y en la calle Bechara, Romero aseguró que las mismas están funcionando adecuadamente. “Todas tienen combustible y están bien atendidas”, mencionó.

Para más información sobre los refugios, los sanjuaneros pueden comunicarse a través de 787-480-2222.