Personal de LUMA Energy tuvo que ser rescatados por oficiales de la Guardia Nacional, tras quedar varados en la noche del miércoles en una carretera inundada entre Hormigueros y Cabo Rojo tras el paso de la tormenta Ernesto.

El alcalde de Cabo Rojo, Jorge Morales, indicó que los empleados de LUMA intentaban llegar a la subestación que está en el sector las Acacias, para tratar de restablecer el servicio de energía eléctrica a sectores de su municipio y de Hormigueros.

Explicó que el personal de LUMA iba con empleados del Municipio de Hormigueros “en un camión de esos que nos regala el ejército. Tratando de llegar, quedaron varados en la ciénaga, con cerca de seis pies de agua”.

“Un camión del Municipio (de Cabo Rojo) trató de llegar para rescatarlos y llevarlos a (la subestación en) las Acacias, que era la misión de restablecer la luz, pero ese también quedó varado”, relató Morales.

“Entonces tuvo que intervenir la Guardia Nacional, realizando un rescate por cuerdas. Todos tuvieron que bajarse de las aguas con las corrientes, Todos fueron rescatados, gracias a Dios, en buen estado”, agregó.

Mientras, un incidente simultáneo se desarrollaba por otra área. Morales apuntó que al recibir información de que los empleados de LUMA y del Municipio de Hormigueros quedaron varados, él mismo y empleados de Cabo Rojo salieron para ayudar. Pero, en el camino, recibieron información de que un vehículo marca Jeep estaba atrapado en el agua en la comunidad Cerrillo, “que por tradición se inunda”.

“Cuando nos avisan que había un Jeep con el agua llegándole a las ventanas, nos desviamos para sacarlo”, dijo el alcalde. “Cuando estamos al lado del Jeep para comenzar a poner las cadenas y las sogas, nuestro camión se apagó, y tuvimos que llamar a Manejo de Emergencias para que nos sacara en el bote pequeño que tenemos, en un dingui, para que nos pudieran llevar a la carretera, a unos 50 a 100 pies de distancia”.

El Jeep pudo ser sacado al ser arrastrado por una excavadora del Municipio de Cabo Rojo, mientras que los camiones, al ser más pesados, fueron dejados en el lugar a la espera de que baje la inundación.

Atribuyó los desperfectos de los camiones a que se trata de vehículos “viejos” que pudieran tener algún orificio por donde le entró el agua.

En cuanto a la subestación, aseguró que están monitoreando el nivel de la inundación para que el personal pueda llegar lo más pronto posible para restablecer el servicio.

Sin embargo, temía que la inundación “en la Bajura puede tardar par de días, pero sé que vamos a poder llegar pronto”.

Sostuvo que, al menos, tenía información de que la estación de bombeo en el área de Cerrillo estaba funcionado con un generador que fue instalado recientemente, a 12 o 14 pies de altura.

“Se comprende el desespero que lleva a que algunos digan que la inundación es porque no se limpió un canal. Es imposible que con la cantidad de agua que bajó se pueda decir que por no limpiar un canal el sector se inundó de esa manera. Eso es lo que nuestros padres llamaban un ‘brazo de mar’. Estos sectores reciben agua de otros pueblos”, expresó Morales.

“Esa agua no cayó solamente en Cabo Rojo. Bajó agua de Maricao, San Germán y Mayagüez. Esos golpes, más el agua que cae en Cabo Rojo, ocasiona todas esas inundaciones”, añadió.