En un emotivo mensaje dirgido a su “Puerto Rico amado”, la madre de Eddie Alberto Caraballo Hernández, uno de los jóvenes que falleció el pasado 5 de diciembre en un accidente de tránsito en Mayagüez, agradeció el apoyo y las muestras de solidaridad que ha recibido por parte de los puertorriqueños tras el trágico incidente.

“Hoy, tomo este espacio porque siento que les debo. Les debo sus oraciones, sus muestras de amor, su compañía. Sabía que mi país era grande en calidad humana, pero esta vez me tocó sentirla muy de cerca, vivirla”, escribió Dyhalmaris Hernández Torres en un publicación en cuenta de Facebook.

“Me han acompañado en este duro trayecto desde el día uno. Hicieron mi dolor su dolor. Viviré agradecida de cada gesto de amor y de su compañía”, expresó la madre del joven estudiante de 21 años.

“Hoy, les confieso que mi hijo quería vivir, tenía grandes sueños y anhelaba servir (...) Eddie sirvió desde sus 10 años, acompañándome en todos los proyectos, en emergencias como huracanes, terremotos y pandemia. Sé que su legado se hará presente en cada proyecto y que Dios nos ayudará a seguir siendo una puerta de esperanza para muchos”, agregó.

Hernández Torres también aprovechó el espacio para dirigirse hacia las personas que han perdido a un ser querido durante estas épocas festivas.

“Quizás nuestra Navidad esté acompañada de la ausencia de lo que más amamos, pero solo les puedo dejar mi fe en Dios como regalo. Pidiendo al Dios soberano que sea su consuelo y que su Belén sea la esperanza de alguien que sufre”, expresó.

El accidente de tránsito se reportó el 5 de diciembre, cerca de la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, cuando el conductor del vehículo presuntamente viajaba a exceso de velocidad e impactó un poste de alumbrado. En el acto, murieron José Marti Rivera Rivera, de 22 años, y Josué Elías Rodríguez Arroyo, de 21. El tercer pasajero, Caraballo Hernández falleció varios días después en el hospital.

Tras el accidente, la Uniformada se dispuso a realizarle la preuba de alcohol al presunto conductor, José Enrique Martínez Rivera, de 21 años. Sin embargo, este se negó, por lo que la Policía solicitó y recibió una orden judicial que obligó a Martínez Rivera a someterse a la extracción de una muestra de sangre.

El pasado 14 de diciembre, la Uniformada indicó que el resultado de la prueba de alcohol en la sangre arrojó que, en efecto, conducía en estado de embriaguez.

En ese momento, el teniente Gualberto Cruz, director de la División de Patrullas de la Carretera de Mayagüez, adelantó a El Nuevo Día, sin revelar el porcentaje exacto de alcohol arrojado en la prueba, que el joven “estaba legalmente ebrio”.