Guánica - Los incesantes sismos que sacudieron con más fuerza la zona sur a principios del año pasado, quizás, han pasado a ser solo un mal recuerdo para muchos puertorriqueños, pero en este municipio -uno de los más afectados- todavía hay familias que duermen en el patio de sus hogares porque carecen de un techo seguro.

Ante esa realidad, el grupo comunitario Team 821 mantiene activo en este pueblo su proyecto “Te cambio tu caseta”, mediante el cual instalan módulos de madera que provean un espacio de resguardo donde los damnificados puedan dormir.

Yeisimar León Martínez, presidenta del Team 821, precisó que, con la ayuda de voluntarios y en alianza con la Coordinadora Paz para la Mujer, entre otras entidades, la organización sin fines de lucro ha suplido tres módulos en distintos barrios de Guánica, donde las familias pueden descansar durante la noche tras completar sus quehaceres diarios en su vivienda.

El grupo comunitario surgió entre compueblanos guaniqueños luego de los sismos del 2020, y creó entonces varios refugios en ese municipio. León Martínez estuvo a cargo de 374 personas por 45 días, lo que la llevó a crear el Team 821, cifra que representa los primeros tres dígitos de los números telefónicos en Guánica.

“El Team 821 es una bendición que esté, que existan y que ayuden, porque realmente lo hacen. Me emociona porque, por ellos, es que tengo dónde estar”, manifestó Carmen Roura, residente en el barrio La Luna de Guánica.

Sin poder contener las lágrimas, Roura, quien vive con su esposo, hija y nieta de cuatro años, recuerda todo lo experimentado durante los temblores que comenzaron el 28 de diciembre de 2019, y que se intensificaron días después, hasta registrarse un terremoto de magnitud 6.4 la madrugada del 7 de enero. Desde entonces, la actividad sísmica no se ha detenido en la zona.

No obstante, Roura afirma que hoy, gracias a la colaboración del Team 821, siente la paz de tener un techo en el que su familia se siente cómoda. Incluso, le añadieron al módulo una terraza para que se asemejara más a su hogar.

Aún faltan módulos por instalar, pues el proceso se ha dilatado debido a la pandemia del COVID-19 y la escasez de mano de obra. Semanalmente, cuatro voluntarios de Cayey, Cidra y Caguas ayudan en la construcción de las unidades hasta el mediodía.

Comprometidos con la educación

El Team 821 también trabaja para la reincorporación presencial a clases de los estudiantes guaniqueños, pues una organización les donará dos salones que serán para alumnos de kínder y primer grado.

Tras los movimientos telúricos, el llamado “Pueblo de las 12 calles” quedó con solo una escuela en pie, y el gobierno municipal comenzó los trámites para reforzar otros dos planteles, que previamente habían sido cerrados, con miras a reanudar las clases presenciales el próximo 16 de agosto, fecha en que comienzan las clases del nuevo año académico en el sistema público.

“Los nenes que nos quedan, yo no los voy a dejar ir. Vamos a hacer lo que sea porque los nenes de Guánica se queden aquí”, insistió León Martínez.

Antes de la pandemia, la organización, que tiene en total 13 voluntarios, estableció lo que se conoció como las “escuelas sin paredes”, lo que ayudó a los jóvenes a completar el grado.

“No voy a parar hasta que consiga escuelas para Guánica. Voy a tocar las puertas que tenga que tocar porque, si ya inicialmente logramos hacer las escuelas sin paredes, yo creo que esta vez, podemos volver a lograr escuelas”, aseguró Thamara García Ortiz, líder encargada del área de educación del Team 821.

Actualmente, Team 821 requiere mayor voluntariado para cumplir con todas las metas que se han trazado. Si desea unirse a esta iniciativa, puede obtener más información en su página de Facebook (www.facebook.com/team821/), cuenta que utilizan para divulgar las necesidades específicas del pueblo y cómo ayudar en la búsqueda de soluciones.