La Iglesia católica de Alemania criticó enérgicamente un carro alegórico creado para un gran desfile público en la ciudad occidental de Colonia que vinculó a Jesús con el escándalo de abusos en la iglesia.

El carro, que fue presentado el martes, muestra a un monaguillo frente a un confesionario con un brazo extendido y una mano abierta que invita al niño a ir hacia adentro. En el lado del confesionario, letras en negrita dicen “Jesús te ama”.

La archidiócesis de Colonia opinó que el carro era “de mal gusto”.

“La inscripción en el confesionario —‘Jesús te ama’— asocia directamente a Jesús, el Hijo de Dios, con el abuso”, escribió en una carta publicada el martes en su sitio web.

“Se sugiere que el mismo Jesús está sentado en el confesionario y quiere atraer al monaguillo hacia él con un gesto de su mano; al menos, aquí se está instrumentalizando a Jesús”, decía la carta.

Los carros alegóricos del desfile del lunes, como parte del Carnaval de Colonia que inicia esta semana, son famosos por burlarse de los poderosos y referirse de manera burlona a controversias. Pero la reacción de la iglesia sugiere que el comité del carnaval de la ciudad fue demasiado lejos esta vez.

“Si se asume que el Hijo de Dios es en parte responsable de los terribles actos de abuso que también han ocurrido, y especialmente en la Iglesia católica, se ha cruzado una línea que no puede ser justificada por ninguna razón en el mundo”, decía la carta de la archidiócesis.

Varios miembros del partido Demócrata Cristiano de centro-derecha, incluido un exalcalde de Colonia, también expresaron su enojo por el carro. En una carta dijeron que la imagen, “que no puede ser superada en términos de vergüenza y mal gusto, no debería menospreciar la procesión del lunes y el carnaval en su conjunto”, informó la agencia de noticias alemana dpa.

Colonia es una ciudad tradicionalmente católica, conocida por su icónica catedral de doble cúpula. Fue uno de los lugares de peregrinación europeos más importantes en la Edad Media.

Sin embargo, muchos católicos alemanes, también en Colonia, han dado la espalda a la Iglesia en los últimos años. Muchos dicen que se sintieron traicionados por la magnitud de las acusaciones de abuso sexual y decepcionados por la persecución inadecuada de los perpetradores por parte de la iglesia.

En 2018, un informe encargado por la Iglesia concluyó que al menos 3,677 personas fueron abusadas por clérigos en Alemania entre 1946 y 2014. Más de la mitad de las víctimas tenían 13 años o menos, y casi un tercio eran monaguillos.

El presidente del Comité del Carnaval de Colonia, Christoph Kuckelkorn, rechazó cualquier crítica al provocador carro alegórico.

“No es la representación del abuso lo que es de mal gusto y vergonzoso, sino más bien el abuso en sí y cómo se maneja”, dijo Kuckelkorn a dpa, añadiendo que el carnaval se trata de sátira y de hacer pensar a la gente.