Nota del editor: no te pierdas ni un detalle tras las elecciones de 2024 en Puerto Rico. Visita nuestro sitio especial para mantenerte informado y regístrate aquí en el boletín Pulso Político.

---

La presidenta alterna de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Jessika Padilla Rivera, negó este miércoles que exista un brote de COVID-19 u otras enfermedades contagiosas entre los funcionarios que laboran en el escrutinio general, como planteó más temprano en el día el comisionado electoral del Partido Nuevo Progresista (PNP), Aníbal Vega Borges.

Los comisionados electorales de otras colectividades, igualmente, rechazaron la advertencia de su homólogo, catalogando las expresiones como un intento de desalentar la participación de los voluntarios en el escrutinio.

“Sé que hay una noticia de que hay un brote de alguna enfermedad, influenza o COVID, pero la realidad es que no hay ningún brote. Aquí, en el escrutinio, no se ha identificado nada significativo que haya algún brote de alguna enfermedad particular. Sí tenemos empleados que se han ausentado y están enfermos; esta presidenta tiene congestión, pero de ahí a que haya un brote significativo que requiere cerrar mesas o implique un atraso en el escrutinio, tenemos que decir que no”, subrayó Padilla Rivera en la tarde, destacando que al Centro de Operaciones Electorales se reportan entre 800 y 900 personas diariamente.

“Hay muchos empleados que empezaron a utilizar mascarillas, se han reportado así. Así que esperamos que ahora, en estos tres días que vamos a tener descanso, se puedan mejorar los funcionarios”, había dicho más temprano Vega Borges, aludiendo al receso de Acción de Gracias que tendrá lugar entre el jueves y sábado.

Según Vega Borges, los supuestos casos del virus se han reportado entre funcionarios de “todos” los partidos.

En cambio, la comisionada electoral del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), Lillian Aponte Dones, negó que exista un “brote”, más allá de los casos típicos de enfermedades respiratorias que se registran según se acerca la Navidad.

“Creo que es un intento también de desmovilizar. El PNP lo ha hecho anteriormente, de tratar de desmovilizar a los voluntarios y voluntarias”, dijo Aponte Dones.

Su homóloga del Partido Popular Democrático, Karla Angleró, afirmó que no ha detectado contagios de COVID-19 entre sus huestes, pero aclaró que la semana pasada había pedido a Padilla Rivera que ordenara desinfectar las mesas de escrutinio luego de cada jornada.

“Noté que no se estaban desinfectando las áreas como es normal cuando tienes muchas personas. Se le dijo a la presidenta, pero desconozco si se está haciendo, porque no lo he visto”, reconoció Angleró.

De cara el receso de tres días, los trabajos de escrutinio ya habían alcanzado colegios electorales del distrito senatorial de Mayagüez –el cuarto de ocho, según el orden establecido–, pero los descuadres en las actas y el conteo de las distintas modalidades de voto adelantado seguían impidiendo este miércoles que se hubieran certificado resultados completos para un solo precinto.

Ante tal escenario, Aponte Dones precisó que el domingo, cuando se retomen los trabajos tras el receso, todas las mesas atenderán maletines de los precintos de San Juan, que son los primeros en el orden de escrutinio y donde se registran tres contiendas cerradas para distritos representativos.

“Deberíamos estar terminando el domingo con San Juan”, sostuvo, por su parte, Padilla Rivera, quien indicó que la cantidad de actas sin cuadrar en la capital se había reducido de las 91 que se reportaron el martes, aunque sin precisar cuántas restaban.

Tan solo en el precinto 3 de la capital –donde Eva Prados, del MVC, supera apretadamente al incumbente, José “Cheíto” Hernández, del PNP–, hay más de 30 maletines con “descuadres”, que se atienden en el área de Control de Actas, dijo Aponte Dones. Desde más temprano esta semana, la CEE incrementó a 26 las mesas de control de actas en un esfuerzo para agilizar la corrección de errores y divulgación de resultados.

En ocasiones, dependiendo de la naturaleza de los errores, los maletines de colegios tienen que regresar a mesa para recontarse.

Angleró criticó, en tanto, que se espere hasta el domingo para concentrar los esfuerzos en los precintos de San Juan. Según la comisionada electoral, los precintos de Guaynabo en adelante no han enfrentado el mismo nivel de complicaciones debido a que comenzaron a trabajarse luego de que se brindara la instrucción de tabular la totalidad de los votos por nominación directa al cargo de representante por acumulación, mientras que en San Juan hubo que volver a contar esas papeletas.

Vega Borges afirmó, por su parte, que los números internos le conceden la victoria al PNP en los cinco distritos representativos, los dos senatoriales y la alcaldía de San Juan.

El comisionado electoral del Partido Independentista Puertorriqueño, Roberto Iván Aponte Berríos, en contraste, insistió que el PNP tiene como costumbre anunciar “proyecciones” que son imposibles de validar cuando restan “miles” de papeletas por contar, así como votos añadidos a mano que serán adjudicados. En el caso del distrito 4 de San Juan –donde la pipiola Adriana Gutiérrez ganó en la noche del evento–, hay 224 votos añadidos a mano que se validaron, indicó el comisionado.

“En (los precintos) 2, 3 y 4, que son contenciosos en San Juan, cuando concluya el 100% se sabrá quién ganó, pero no voy a adelantarme”, dijo Aponte Berríos.

Pese al persistente tranque en San Juan, Padilla Rivera insistió en que el escrutinio general mantiene el ritmo necesario para culminar en diciembre. Según la presidenta alterna, se había estimado que sería necesario contar 179 maletines diarios para completar el proceso entre el 20 y 22 de diciembre, pero que un día se completaron 265.