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Aunque ya se escogió la compañía que imprimirá las papeletas para las elecciones generales, la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) aún no ha podido depurar el registro electoral de difuntos y tan reciente como la semana pasada recibió otro informe de fallecidos del Registro Demográfico que debe atender.

Al momento, la CEE cuenta con un listado total de 43,065 difuntos, de acuerdo con la más reciente descarga del Registro Demográfico.

“Yo me siento hasta un poco frustrada porque llevamos tratando de trabajar este asunto con premura en la comisión desde junio del año pasado”, dijo la comisionada electoral del Partido Popular Democrático (PPD), Karla Angleró.

“Hay un atraso. Es muy probable que no se pueda cumplir con la eliminación de la totalidad de esos difuntos y eso -para mí- no tiene excusas. No se le dio la prioridad en los primeros años”, agregó.

Recordó que la CEE no cuenta con el personal necesario para atender este asunto y que el contrato con Servicio de Innovación y Tecnología de Puerto Rico (Prits) para acelerar la depuración “vino a firmarse ahora”. Recalcó, además, que mantienen conversaciones con Prits desde marzo.

“La presidenta (de la CEE, Jessika Padilla Rivera), dice que da seguimiento (a Prits) y no le contestan el teléfono. Nos queda un mes para que el registro cierre”, afirmó Angleró.

El registro electoral cierra el 21 de septiembre, según el calendario electoral aprobado por la CEE. Eso significa que después de esa fecha no se puede hacer ningún cambio o transacción electoral en el registro.

Este medio intentó entrevistar a la presidenta de la CEE, pero no estuvo disponible.

“Ojalá me equivoque, pero por la proyección que ha habido y los traspiés que ha tenido la CEE, veo un enorme reto para completarlo. Lamentablemente, sigue habiendo una enorme preocupación de un proyecto que desde el 2021 lo veníamos señalando y queda poco tiempo para completarlo”, apuntó el comisionado electoral del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Roberto Iván Aponte.

La presidenta alterna de la CEE ha dicho públicamente que, de el registro electoral contar con muertos, no sería la primera vez.

“Eso no puede ser excusa de que todos los años lo hagamos mal para que ahora también lo hagamos mal. Da mucho de qué hablar en el país cuando estamos tratando que la CEE vuelva a tener el brillo que tuvo en un momento dado. Es responsabilidad de todos, de los comisionados y de la presidenta”, sentenció Angleró.

Los comisionados electorales recordaron que un registro electoral no debe contar con personas fallecidas hace meses o años.

De ordinario, el registro electoral se cierra antes del día de las elecciones sin que contenga las exclusiones de los muertos de hace uno o dos meses antes de la fecha de su cierre. Sin embargo, la Secretaría de la CEE se encargaba de hacerlo luego de que se cerraba el registro electoral y se imprimían las listas de electores, un listado que recogía a la personas excluídas por muertes, entre otras.

Además, Angleró sostuvo que la Unidad de Exclusiones, dependencia de la CEE que trabaja las depuraciones, solo tiene dos de cinco empleados. Denunció que la CEE ha tenido múltiples renuncias de empleados que hallan mejor remuneración económica en otras dependencias del gobierno.

Su homóloga del Movimiento Victoria Ciudadana, Lillian Aponte, puntualizó, por su parte, que la cifra de los 43,065 difuntos no incluye cantidades adicionales del Registro Demográfico que se han descargado en la CEE desde mayo pasado.

“Deben ser más de los 43,065. Según el Registro Demográfico fallecen alrededor de 3,000 al mes y hay que depurarlo para saber cuáles pudiesen ser electores”, dijo la comisionada.

El comisionado electoral del Partido Nuevo Progresista (PNP), Aníbal Vega Borges, dijo que no hay salida y hay que trabajar la depuración, aunque sea con empleados en destaque.

“Hay que trabajarlo. Eso es una responsabilidad. El PNP buscará los destaques para eso”, sostuvo no sin antes indicar que en la actualidad cuentan con 40 empleados públicos en destaque. “Hemos pedido bastantes y esta semana pediremos más”.

Pero Angleró indicó que el PPD solo cuenta con 29 empleados administrativos en destaque. “Tengo una lista de casi 15 que no me han aprobado”, afirmó.

Por el momento, la CEE, paralelamente, trabaja con otros preparativos para las elecciones generales del 5 de noviembre. Se inspeccionaron los centros de votación y ahora corresponde que se escoja la cantidad de colegios. Angleró dijo que aún están a tiempo para esa faena, pero destacó que es necesario que la presidenta de la CEE resuelva un asunto que quedó bajo su atención, luego de un disenso entre los comisionados electorales.

Según Angleró, antes se deben resolver “las consolidaciones de unidad que ella tiene bajo su consideración desde febrero”. “Eso sí está tarde”, sostuvo.

Vega Borges destacó que sí se acordó que la cantidad de colegios no debe ser menor a los poco más de 4,500 que hubo en las elecciones del 2020.

Entretanto, el pleno de la CEE aprobó por unanimidad escoger a la empresa Printech para la impresión de las papeletas para las elecciones generales. Para ese día, el elector tendrá ante su consideración cinco papeletas: la estatal, la legislativa, la municipal, una para la selección simbólica del presidente de los Estados Unidos y una para una consulta de status criolla.

Printech deberá imprimir 10 millones de papeletas por $1.2 millones.

“Unánimemente se escogió Printech por todos los factores, entre ellos, que tiene el material, puede cumplir porque hizo el trabajo en elecciones anteriores”, dijo Aponte.

La empresa Printech, ubicada en Cayey, estuvo a cargo de la impresión de las papeletas para las primarias locales de 2020, y alertó a la CEE que el material electoral no estaría listo a tiempo para el evento electoral del 9 de agosto. Esas primarias locales fueron abortadas, por primera vez en la historia política de la isla.

Para ese entonces, el 3 de julio del 2020, la CEE hizo la orden de compra; y el 7 de julio -un mes antes de las primarias-, le envió por correo electrónico a la imprenta los detalles de todas las papeletas a imprimir, para un costo total de $2,736,598.44.

Cuestionado sobre el traspiés que hubo en el 2020 y cómo evitarlo nuevamente, el comisionado electoral del PIP dijo que “eso tuvo que ver más con el dinero que tenía que aprobar la Junta Fiscal”.

Printech fue escogida porque no solo tenía la propuesta más económica, sino que tiene separado papel para la impresión de 8,750,000 papeletas. Ninguna de las tres empresas que presentaron propuestas, Printech, Professional Graphics y Model Offset Printings, exigía un depósito a la CEE, según se desprende del documento de la Oficina de Compras y Suministros de la CEE con los detalles del récord de cotizaciones.

Professional Graphics cotizó $1,650,000 y Model Offset Printings $1,670,000, de acuerdo con el documento.