El asesinato del entonces agente Eliezer Ramos Vélez en abril pasado destapó una extensa conspiración entre múltiples peligrosas gangas narcotraficantes en la zona metropolitana que contaban con la cooperación de “policías corruptos” y con dos miembros acusados por los asesinatos dos féminas adolescentes en julio de 2023.

Ramos Vélez, quien mañana, jueves, hubiese cumplido 36 años de edad y 12 como agente, no sabía en ese momento a lo que se enfrentaba y sólo persiguió a unos individuos porque los vio disparando mientras conducían vehículos todo terreno por el expreso Román Baldotioty de Castro en Carolina, hasta el residencial Sabana Abajo, donde fue asesinado a tiros.

Según documentos judiciales revelados este miércoles en el Tribunal federal en San Juan, tras ese crimen comenzó una investigación de varios meses que resultó en un pliego acusatorio contra 56 personas emitido el 5 de diciembre por un gran jurado por cargos de narcotráfico contra presuntos miembros de varias organizaciones criminales que tenían acuerdos y contra el policía Fernando Torres Galarza, adscrito al Negociado del Tránsito de la Policía de Puerto Rico.

Entre los acusados, figuran cinco individuos que, presuntamente, asesinaron a Ramos Vélez, quien fue ascendido póstumamente a sargento y padre de un niño de nueve años. Se trata del noveno cargo del pliego acusatorio, que responsabiliza por la muerte del policía a Víctor Pérez Fernández, Andyel González Sáez, Olvin O’Neill Concepción Tapia, Daniel J. López Vega y Luis Nomar Isaac Sánchez, mejor conocido como “CDobleta” en la industria de la música urbana.

“Estos cinco acusados se enfrentan a una posible pena de cadena perpetua y, si lo autorizada el Fiscal General de Estados Unidos, a la pena de muerte”, indicó el jefe de la Fiscalía federal en Puerto Rico, William Stephen Muldrow.

En mayo pasado, el comisionado de la Policía, el coronel Antonio López Figueroa, aseguró que había esclarecido el caso del asesinato de Ramos Vélez y, mientras buscaba evidencia, señaló a Isaac Sánchez como “persona de interés”.

En ese momento no se radicó el caso contra Isaac Sánchez, pero en abril de este año, al ser acusado por un delito de armas registrado enoctubre de 2023, la Fiscalía federal indicó, en una moción sobre la noche del asesinato, que “Isaac (Sánchez) dijo a los agentes de HSI (División de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional) que escuchó disparos mientras viajaba e hizo un gesto a sus compañeros de viaje en referencia al tiroteo”.

“Admitió, además, que se encontraba en Sabana Abajo cuando escuchó disparos, los cuales corresponden a los disparos que le quitaron la vida al oficial asesinado (Ramos Vélez)”, añadió la Fiscalía federal.

Durante una conferencia de prensa este miércoles, Muldrow declinó comentar sobre el rol específico que, supuestamente, desempeñaron cada uno de los cinco acusados en el asesinato.

Issac Sánchez, quien se encontraba libre bajo fianza, fue uno de los arrestados por el nuevo caso. Al momento quedan 16 prófugos del total de 56 acusados.

“La organización involucrada en este incidente ya estaba en el radar de las agencias de ley y orden por la ola de terror que estaban dejando en las zonas de San Juan, Carolina y Loíza”, manifestó el director del Negociado Federal de Investigaciones (FBI) en Puerto Rico , el agente especial a cargo (SAIC) Joseph González. “Este fue uno de los varios incidentes en que personas inocentes pagaron con su vidas”.

En una moción radicada este miércoles, la Fiscalía federal sostuvo que el asesinato de Ramos Vélez fue un ejemplo del nivel de violencia empleado por los presuntos conspiradores para mantener el control del narcotráfico en su área.

La agencia federal señaló que “miembros de esta pandilla, que trataban de protegerse a sí mismos y a su territorio de amenazas percibidas, asesinaron al oficial de la Policía de Puerto Rico Eliezer Ramos Vélez en el cumplimiento de su deber”.

“El oficial Ramos Vélez, quien estaba en uniforme pero en su vehículo personal, persiguió a los miembros de esta organización que habían estado disparando armas a lo largo de la avenida Baldorioty. A su llegada al Proyecto de Vivienda Pública Sabana Abajo, recibió múltiples disparos salvajes”, añadió.

“Los miembros de esta pandilla también han participado en el asesinato de otras personas inocentes, que estaban en el lugar equivocado en el momento equivocado. Según el testimonio de testigos, miembros de esta pandilla participaron en el asesinato de dos adolescentes en el área de Piñones, porque creían que eran una amenaza”, abundó.

La Fiscalía federal se referió a Jose Martínez Serrano y a Edwin Flores Tavárez, quienes figuran en el pliego acusatorio de este miércoles por cargos de narcotráfico, pero en abril pasado fueron acusados por los asesinatos de las adolescentes Tanaisha Michelle de Jesús Curet, de 15 años, y Nahia Paola Ramos López, de 13 años, en el área de Piñones, en Loíza.

Los cargos del gran jurado incluyen un pedido de confiscación por $31 millones que los acusados supuestamente habrían generado en ganancias desde el 2021 por tráfico de heroína, fentanilo, cocaína, cocaína crack, marihuana y otras sustancias controladas en los residenciales Sábana Abajo, Luis Llorens Torres, Los Mirtos, Lagos de Blasina, La Esmeralda, El Coral y Monte Hatillo.

Muldrow explicó que en el 2021 las organizaciones que operaban en esas áreas de San Juan y Carolina llegaron a una cuerdo para llevar a cabo operaciones como “aliados”.

Luego, cada “organización mantuvo su liderazgo y estructura”, detalló el funcionario, “Como parte del acuerdo no habría guerra entre estas organizaciones y los miembros podrían confiar unos en otros para protección, drogas y armas”.

Señaló que, frecuentemente, llevaban a cabo “reuniones y frecuentaban los residenciales de los demás, y los mismos bares y clubes juntos; participaron en conciertos y vídeos musicales juntos, grabando en los residenciales utilizando armas reales para proyectar el poder de su alianza”.

“Los miembros de las gangas identificaban su afiliación con joyas alusivas a sus residenciales, organización o nombres de sellos discográficos, incluidos LCF (La Familia Carolina), LMM (Loyalty Music Money) y LMG (Loyalty Music Group)”, apuntó Muldrow.

“La investigación reveló que se dedicaban al tráfico de armas de fuego y municiones ilegales utilizando sus cuentas de redes sociales y otras aplicaciones y plataformas de redes sociales”, abundó.

Los 56 acusados enfrentan cargos por narcotráfico. Mientras, 37 de los acusados enfrentan cargos por violación a la Ley de Armas federal, ocho de los cuales se exponen a penas por uso de armas alteradas para disparar de forma automática, mientras que cinco solamente están acusados por el asesinato.

Según Muldrow, la investigación sostiene que “los acusados obtuvieron información de agentes de (la) policía (de Puerto Rico) corruptos para vigilar a miembros de gangas rivales y evitar la detección de las fuerzas del orden orden”.

“En ocasiones, los agentes de policía corruptos accedieron a bases de datos de la Policía (estatal) para obtener información privilegiada, como datos de registro de vehículos y datos de identificación personal”, destacó.

Pese a la mención en plural, el pliego acusatorio solo incluyó a un oficial activo de la Policía estatal, Torres Galarza, conocido como “Perro”.

El jefe del FBI en Puerto Rico, González, indicó que el rol de Torres Galarza consistió precisamente en “proveer información sensitiva de la Policía a miembros de la organización”.

A su vez, Muldrow rechazó confirmar “si hay más o menos” policías involucrados en el caso. “Lo que estoy diciendo es que vamos a seguir investigando”.

Por su parte, el secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Alexis Torres, manifestó que “eliminamos un traidor en el día de hoy”.

“Pero, de igual forma que hablamos de esa traición, tenemos que mencionar que cada uno de los policías que están aquí llevaron a cabo la investigación pese a conocer los particulares de ese sujeto”, añadió.

Por su parte, López Figueroa dijo que fue una “sorpresa” y que le causó “profunda decepción” conocer que “un agente fue vinculado a esta organización. Esto representa una alta traición a los principios que juramenta un policía y al uniforme que con orgullo y gallardía defendemos todos. Por sus actos, ahora, le tocará vestir otro uniforme, el de confinado”.

El oficial dijo que Torres Galarza tuvo “varias investigaciones” en su contra, incluyendo “una que fue probada”.

“En una de ellas se había recomendado una expulsión. Se encuentra en la División Legal”, detalló López Figueroa, quien dejó entrever que la querella contra Torres Galarza tendría que ver con alguna intervención en la que expidió un boleto a algún ciudadano.

Asimismo, el jefe policiaco destacó que “la muerte de Eliezer no fue en vano, ni quedó impune”.

“El trabajo que él inició esa madrugada en la que le arrebataron la vida de manera cruel, fue completado hoy, con el arresto de sobre 50 individuos que integran una organización de narcotraficantes que cometían crímenes violentos y que necesitaban ser sacados de las calles, como Eliezer intentó hacerlo”, expuso el comisionado.

Durante al conferencia de prensa, Muldrow destacó la presencia de la hermana del sargento, Natalie Ramos, quien la semana pasada publicó en las redes sociales una invitación para celebrar la vida de Ramos Vélez.

“Hace ocho meses nuestras vidas cambiaron para siempre con la desgarradora noticia de su partida. Su ausencia ha dejado un vacío inmenso, pero también nos ha mostrado cuántos corazones tocó con su luz, bondad y alegría”, manifestó Natalie Ramos.

“Nos gustaría invitarte a un homenaje en su memoria, un momento especial para recordar los momentos inolvidables que compartimos con él y honrar la huella que dejó en nuestras vidas”, exhortó.