Don William Torres, de 90 años de edad, fue ingresado a la unidad de cuidado intensivo en un hospital del sur de Puerto Rico este martes, mientras sus familiares y las autoridades buscan conocer quién fue el responsable de la terrible golpiza que alguien le propinó este pasado domingo en su casa, en Sabana Grande.

El hijo del nonagenario, también llamado William Torres, indicó que habían llevado a su padre al hospital después de haber estado recluido tras el incidente, pero notaron que, repentinamente, dejó de hablar.

“Se puso malo otra vez. No sé si es que fue por revivir lo que pasó o qué, pero le dio un infarto”, expresó Torres, hijo, en conversación telefónica con El Nuevo Día. “Ya son dos infartos que le han dado. Ahora lo tienen en intensivo y no tengo acceso a él hasta por la tarde”.

“Él no tenía problemas del corazón, pero como fue tan fuerte lo que le sucedió, que algo le pasó que lo debilitó”, agregó. “Fueron golpes muy fuertes”.

Todavía los familiares no se explican cómo alguien pudo haber sido capaz de un ataque tan despiadado, que dejó al adulto mayor con ambos ojos y labios completamente hinchados, así como su rostro ensangrentado.

Los hechos fueron reportados temprano en la mañana de este pasado domingo, en la casa ubicada en el barrio Guaras, en Sabana Grande.

Según relató Torres, de lo poco que saben hasta el momento, el anciano, quien vive solo, abrió una de las tres puertas de la casa para que entrara su gata y darle comida

“La tiene ñoña. Ese es su amor y compañía. Su esposa falleció. Así que esa es su bebé”, comentó. “Él la deja entrar como diez veces al día, aguantando la puerta para que entre”.

“Se entretiene con la gata, el gallo, la gallina y las palomas que llegan cuando le echa maíz”, abundó Torres, quien detalló que su padre siempre se ha valido por sí mismo y hasta participa en la preparación de su desayuno con “galletas de manteca y un sándwich de tres pisos. Después almuerza de todo, arroz, habichuelas, garbanzos, pechuga...”

“Él come bien. Esta fuerte. No tenía ningún problema hasta que este muchacho le desgració la vida”, lamentó.

Su padre le dijo que alguien entró a la casa y de inmediato le dijo: “William, esto es un asalto”.

“Él dice que la persona lo llamó por el nombre, pero no sé si es que papi está confuso”, apuntó el hombre.

Detalló, además, que la agresión surgió cuando el nonagenario le dijo al agresor que no tenía dinero para darle. “Sucedió bien rápido. Cuando se viró ya le había enganchado el primer puño”, expuso.

Sin embargo, les llama la atención que el supuesto asaltante no robó nada en la casa, ni si quiera la cadena de oro que tenía la víctima.

“Ese que entró tenía que estar arrebata’o porque papi tenía una cadena en el cuello , de oro, y no se la quitó. Le pregunté si le había dado algún dinero, y me dijo que no, pero sí tenía en el bolsillo, así que no le buscó”, manifestó. “Tampoco entró al cuarto. Todo estaba ordenado y su cartera estaba allí. ¿Qué clase de animal fue el que entró? Tenía que estar arrebatado o se puso nervioso de tanta pela que le dio a mi papá. Es como si hubiera entrado solo por darle la pela”.

De acuerdo con lo que le dijo su padre, Torres indicó que desconocen si había una segunda persona con el agresor al momento de los hechos.

Asimismo, señaló que “el barrio está bien vigilado. Las autoridades le están dando mucho seguimiento y están moviendo todas las piedras”.

“Ese barrio es tan tranquilo... que no sabemos cómo se le ocurrió a esa persona haber hecho eso a mi papá. Ahí no se oyen ruidos de nada. No se ve a nadie caminando por la calle. Todo el mundo está encerrado”, comentó.

“Todos se conocen y casi todos son familia. Alrededor de mi papá nada más, todos son hermanos, sobrinos... es un círculo que él tiene alrededor”, explicó.

Para continuar investigando el caso, la Policía conformó un equipo que consiste de oficiales de las divisiones de Homicidios, Agresiones, Drogas, Inteligencia y Arrestos.

El inspector Joel González, director del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Mayagüez, dijo que, durante los trabajos de investigación, dieron con dos hombres a quienes les encontraron armas de fuego, por lo que fueron arrestados.

Sin embargo, González sostuvo que, por el momento, no podía confirmar o descartar que tengan alguna relación con la agresión a don William. Sobre el resto del caso, González se limitó a decir que “sigue bajo investigación”.

Por su parte, el superintendente auxiliar de investigaciones criminales de la Policía, Manuel de Jesús, dijo, durante una conferencia de prensa este martes, que estaban intentando corroborar las distintas confidencias que habían comenzado a recibir.

De acuerdo con De Jesús, una de esas confidencias planteó que supuestamente alguien esperó al agresor fuera de la casa y se lo llevó en una motora.

Además, apuntó a que, tras otra confidencia, buscan confirmar o descartar la participación de un hombre que fue asesinado en la madrugada del lunes en Sabana Grande, identificado posteriormente como Kenneth Camacho.

Su cuerpo baleado fue hallado en un apartamento del residencial José A. Castillo, en ese municipio. Más tarde ese día, la madre de Camacho acudió a las redes sociales para negar cualquier vínculo de su hijo con el caso de agresión del adulto mayor.

Aunque originalmente se hicieron expresiones sobre que Camacho no habría estado vinculado en el crimen, De Jesús dijo que, en el transcurso de la pesquisa, ha surgido otra información que están en proceso de corroborar, “así que estamos hablando de dos individuos, y no descartamos que tenga que ver con el caso”.

“No necesariamente fue el que le dio la golpiza, pero no descartamos que haya participado”, planteó.