Un hombre que presuntamente intentaba enviar dos osamentas a través de una compañía privada de correo postal a principios de mes, en Aguadilla, enfrenta cargos desde este lunes por profanación de cadáveres.

Según un informe de la Policía, a George Rivera Rosa, de 46 años y residente del barrio Pozas, en San Sebastián, se le radicó un cargo por el cual el juez Davier Alfaro Alfaro, del Tribunal de Aguadilla, encontró causa para arresto.

A Rivera Rosa se le impuso una fianza de $5,000, que prestó por medio de un fiador privado.

El pasado 3 de marzo, Rivera Rosa, junto a otro hombre, intentó enviar al estado de Florida, por medio de la compañía FedEx, un paquete que contenía dos osamentas.

Sin embargo, la empleada del correo notó un fuerte olor a perfume que emanaba de la caja que le entregaron los hombres e informó al equipo de seguridad de la empresa, quienes luego verificaron el envío por medio de una máquina de rayos X y encontraron las osamentas.

Parte de la investigación del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Aguadilla se centró en corroborar si las osamentas correspondían a personas reportadas como desaparecidas o, incluso, que sean restos cuyas tumbas hayan sido profanadas.

En ese momento, El Nuevo Día preguntó a las autoridades sobre si este caso podría estar vinculado con prácticas de brujería, a lo que el director del CIC de Aguadilla, Eduardo Rivera González, expresó que “son ángulos que dentro de la investigación no descartamos. Siempre se verifica y se corrobora todos los ángulos”.