La jueza federal Gina Méndez Miró ordenó que trasladen a Puerto Rico a Danielle Bertothy para poder comenzar el proceso judicial en su contra por cargos relacionados al incendio de varios negocios en Cabo Rojo.

La orden surge luego de que pasara más de un mes desde que un gran jurado federal emitiera una acusación en contra de la mujer, quien estuvo como turista en la isla a principios de enero pasado, hasta que en la mañana siguiente a los hechos regresó a su casa en Missouri, donde permanece detenida.

La Fiscalía federal presentó una moción el viernes pasado avisando que una jueza federal en Missouri ya había emitido una orden de mantener bajo custodia a Bertothy hasta que pase el juicio, denegándole libertad bajo fianza, el pasado 28 de enero.

Sin embargo, “la acusada permanece en tránsito a este distrito” de Puerto Rico.

La fiscal Corinne Cordero Romo explicó que la situación presenta la complicación de que el abogado que la representó en Missouri ya no está en el caso y no puede litigar en Puerto Rico, por lo que el Ministerio Público no ha podido entregar el descubrimiento de prueba del caso.

“Para que los procedimientos continúen y se preserven los derechos del acusado, el Ministerio Público solicita que este tribunal programe una audiencia para abordar la cuestión de la representación legal pendiente”, solicitó la fiscal.

Bertothy todavía figura ingresada en el Centro de Detención de Grayson County, en Missouri, que no es una instalación del Negociado federal de Prisiones (BOP, por sus siglas en inglés).

En una orden emitida este miércoles, la jueza Méndez Miró instruyó al Servicio federal de Alguaciles que “traiga a la acusada a este distrito en o antes del 26 de febrero”.

“Una vez esté en este distrito, la acusada Bertothy será llevada de inmediato ante el magistrado de turno para los procedimientos iniciales y el nombramiento de un abogado”, dispuso la jueza federal.

Bertothy, de 36 años, fue acusada por provocar un incendio que causó daños a Luichy’s Seaside Hotel - que tenía 15 habitaciones ocupadas al momento de ocurrir el siniestro - estimados en cerca de $500,000, así como en otros negocios que son inquilinos en la misma estructura: el restaurante Bar Marea, el restaurante Marinera y el negocio Artesanías Juavia.