Una oficial correccional, adscrita al Centro de Rehabilitación para Mujeres en Bayamón, fue arrestada luego que se le encontrara presuntamente marihuana adulterada con fentanilo en el interior de su vehículo, el cual estaba estacionado en la institución.

La oficial correccional, identificada como Gismari R. Santana Villegas, de 26 años y residente del pueblo de Toa Baja, se convirtió en la tercera empleada del Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR) en ser arrestada en lo que va de este 2025.

Por estos hechos, el fiscal Peter Cordero le formuló dos cargos a la oficial correccional por violación a la Ley de Sustancias Controladas, específicamente el Artículo 404, que penaliza la posesión de drogas.

De acuerdo a la investigación realizada por el DCR y la Policía, Santana Villegas se arrestó luego que las autoridades obtuvieran “los motivos fundados para solicitar una orden de registro y allanamiento”, ante el tribunal, para revisar su vehículo personal.

“Como resultado de la orden, ocuparon en el interior del vehículo aparente sustancias controladas. La misma fue llevada a la División (de) Drogas Metro, y al realizarle la prueba de campo, resultó positiva a marihuana adulterada con fentanilo”, indica el informe emitido por la Uniformada.

Santana Villegas fue llevada ante el juez de turno del Tribunal de San Juan, que no fue identificado, quien luego de escuchar la prueba, encontró causa para arresto por los mencionados delitos.

La oficial correccional prestó la fianza de $2,000 que se le impuso, por lo que fue fichada y dejada en libertad hasta la vista preliminar, pautada para el 30 de abril.

Por su parte, el secretario del DCR, Francisco Antonio Quiñones Rivera, explicó que, el 16 de abril, la oficial fue atendida en el Centro Médico Correccional por una aparente contaminación con sustancias controladas.

Como parte del protocolo de seguridad, la Unidad Canina del DCR inspeccionó las áreas del Centro de Rehabilitación para Mujeres en Bayamón. El can marcó un vehículo que resultó ser el de Santana Villegas.

“No nos temblará la mano en procesar a todo aquel que deshonre el uniforme y cometa actos ilegales. El DCR está compuesto por hombres y mujeres que diariamente dan la milla extra por la seguridad de las personas privadas de la libertad y no vamos a permitir que personas inescrupulosas manchen el buen nombre de los compañeros que trabajan con rectitud y honestidad”, señaló el secretario. 

Luego del arresto, Santana Villegas fue suspendida de empleo y sueldo, como parte de la investigación administrativa que lleva a cabo la Oficina de Investigaciones del Sistema Correccional.

“En el DCR continuamos realizando las investigaciones internas necesarias para garantizar la seguridad de las personas bajo nuestra custodia así como de nuestro personal”, concluyó Quiñones Rivera.

Cabe destacar que, a principios de abril, un oficial correccional fue detenido luego de ser sorprendido intentando introducir dos teléfonos celulares a la institución 705 en Bayamón.

En ese entonces, el titular del DCR explicó que uno de los perros de la Unidad Canina fue quien detectó los celulares en una inspección rutinaria.

El oficial involucrado fue identificado como José A. Cabrera Torres y enfrenta medidas disciplinarias, incluyendo la suspensión de empleo y sueldo.

“Situaciones como estas van a ser atendidas con la rigurosidad que amerita. Una vez más, quiero dejar claro que no vamos a permitir que personas sin escrúpulos manchen el buen nombre de los miles de compañeros y compañeras que día a día hacen un trabajo de excelencia”, enfatizó el funcionario.

De otro lado, una oficial correccional fue arrestada, el 25 de marzo, por las autoridades por presuntamente ingresar contrabando y narcóticos, específicamente fentanilo y cocaína, a la Institución Guayama 500.

La empleada fue identificada como Nashaly Roxane González Rodríguez, quien llevaba cinco años en el DCR y era objeto de investigación desde hace meses.

“Estamos limpiando la casa”, dijo Quiñones Rivera, en aquel momento, durante una conferencia de prensa desde la Comandancia de la Policía en Caguas.