El abogado de Frankluis Carela De Jesús -uno de los cuatro acusados a nivel federal de contrabando de 113 aves exóticas cuyas jaulas fueron lanzadas a altamar cuando fueron sorprendidos por las autoridades-, radicó una moción en la cual solicita ser sentenciado a 10 meses de prisión.

En el documento, que tiene fecha del 2 de marzo y cuya copia obtuvo El Nuevo Día, el licenciado Jackson Whetsel argumentó que su representado está arrepentido y que deben tomarse en consideración varios factores, entre ellos, que es primer ofensor y no tenía antecedentes penales.

Carela será sentenciado el próximo jueves en la sala 1 del Tribunal federal en Hato Rey.

“El señor Carela reconoce los resultados perturbadores de su delito y no desea eludir su responsabilidad. Al contrario, acepta toda la responsabilidad de sus actos y de su mala toma de decisiones”, mencionó el licenciado.

Whetsel afirmó que su representado ha aprendido la lección, y que, de cara al futuro, su único objetivo es simplemente estar presente, apoyar y amar a su familia, aunque está consciente que el camino no será fácil.

“Sabe que le espera un duro camino, con una probable deportación tras este proceso penal. Aún está por determinar su podrá regresar legalmente o si su mujer y su hijo podrán trasladarse a la República Dominicana. En cualquier caso, el objetivo es que la familia se reúna”, abundó.

Carela -que nació en El Ceibo, República Dominicana- fue uno de los cuatro individuos que acusados a nivel federal por contrabando de aves exóticas. Un gran jurado emitió la acusación el 3 de mayo de 2024.

Según la moción, el acusado enfrentaba dificultades económicas a finales de 2024 cuando “tomó la mala decisión de considerar la idea de llevar animales en un barco desde Puerto Rico”.

“Está muy arrepentido de este error. Desearía poder volver atrás. Sabe que no puede y comprende que debe ser penalizado”, dijo el abogado sobre su representado, quien presuntamente no tenía la intención de que le ocurriera nada malo a las aves.

“Intentaron primero abrir las jaulas para que las aves pudieran salir volando. Cuando se dieron cuenta de que no podían hacerlo, fue entonces cuando se tomó la muy mala y lamentada decisión de descargarlas. El señor Carela pide disculpas por esta mala decisión”, agregó el licenciado.

Mencionó que la mala decisión de su cliente fue tomada en una situación de “estrés y pánico” y no fue una conducta “fruto de una toma de decisiones fría y deliberada”. “Sin duda, si pudiera, se retractaría de esa decisión”, abundó el abogado.

Sin embargo, la Fiscalía federal está solicitando una sentencia de 18 meses de prisión y tres años de libertad supervisada contra el hombre identificado como el capitán del bote que transportada las cientos de aves exóticas.

“A principios del 2024, se le ofreció a Carela de Jesús $5,000 para transportar pájaros a la República Dominicana en bote. Él sabía que dicho esfuerzo era ilegal y estaba al tanto del potencial de encarcelamiento. Carela de Jesús era uno de los capitanes del navío y describió una conversación en la que él y otra persona planificaron soltar las aves, eliminando la evidencia de ilegalidad, de ser detenidos durante la travesía”, dijo la fiscalía en su memorando de sentencia.

En el bote había distintas aves, entre ellas cotorras coronirrojas, una especie peligro de extinción. Otras especies eran cotorras de corona blanca, cotorrillas de mejillas verdes, cotorras de Kramer y cotorritas del sol.

Según la Fiscalía federal, el tráfico ilegal de especies genera aproximadamente $20,000 millones anuales a nivel mundial. Sin embargo, las aves son los animales más comercializados.

“Las cotorras componen cerca del 90% del tráfico ilegal de aves. Como grupo, tiene el mayor riesgo de extinción de cualquier orden comparable de pájaros”, abundó.

Además de Carela De Jesús fueron acusados Waner Balbuena, Juan Graviel Ramírez Cedano y Domingo Heureau Altagracia, de acuerdo a un comunicado de prensa que emitió la Fiscalía federal.

De acuerdo a los expedientes judiciales, Balbuena y Ramírez Cedano fueron sentenciados por la jueza federal Aida Delgado Colón a un año y un día de prisión.

En el caso de Heureau Altagracia, las autoridades federales han solicitado una pena de un año de prisión y otros tres de libertad supervisada.

Según la acusación, los individuos viajaban en una embarcación sin bandera que partió de San Juan, Puerto Rico, con destino a la República Dominicana. El propósito del viaje era contrabandear varias especies.

Sin embargo, cuando la embarcación se encontraba aproximadamente a 30 millas náuticas al norte de Puerto Rico, la Guardia Costera se acercó y presenció cómo los sujetos presuntamente lanzaban jaulas de madera que contenían aves tropicales.

Un total de aproximadamente 113 aves muertas fueron recuperadas dentro de las jaulas de madera arrojadas por los acusados, que carecían de licencia para exportar la fauna silvestre y no declararon las aves tropicales como exigen las normas federales.