El problema inicial, el hambre, las limitaciones de recursos, de pensamiento y las violaciones a los derechos humanos de sus ciudadanos los creó y los sigue creando la dictadura, escribe Andrés Fortuño Ramírez
El problema inicial, el hambre, las limitaciones de recursos, de pensamiento y las violaciones a los derechos humanos de sus ciudadanos los creó y los sigue creando la dictadura, escribe Andrés Fortuño Ramírez
La ciudad de Miami anda tan o más revuelta que Santiago de Cuba. Desde hace unos días el tema de moda son las marchas en contra de la dictadura en la isla. Se escuchan las diversas opiniones en las cafeterías, en los restaurantes y hasta en las barberías de la Calle Ocho. Y aunque todos están de acuerdo en que es hora de que el pueblo cubano se rebele, han aparecido dos bandos a la hora de repartir culpas.
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