Que hayan tenido que pasar casi veinte años desde que se detectó el uso ilegal de las aguas de un pozo subterráneo, por parte de una empresa de asfalto de Salinas, para que se le imponga ahora una multa, evidencia la inoperancia en que ha estado sumido el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), atrapado en ese marasmo de oportunismo y burocracia que tanto daño ha causado.
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Urge defender los acuíferos con agilidad y eficiencia
Nota de archivo
Esta historia fue publicada hace más de 1 año.