Las múltiples facciones que se asocian para participar en las primarias de mañana domingo se han degradado hasta convertirse en figuras de una terrible ópera bufa. Son grupos desesperados por llegar o mantenerse en el poder, escribe Eduardo Lalo
Las múltiples facciones que se asocian para participar en las primarias de mañana domingo se han degradado hasta convertirse en figuras de una terrible ópera bufa. Son grupos desesperados por llegar o mantenerse en el poder, escribe Eduardo Lalo
Mañana domingo serán las primarias del bipartidismo. Durante décadas y hasta hoy, aunque de manera deteriorada, un ecosistema institucional y mediático se organizó para servirle al PNP y al PPD. Durante muchos años, un régimen colonial y bipartita, en contubernio con las autoridades federales, se erigió para acaparar el 95% de los electores. Los dos partidos principales se turnaban en el limitado poder de La Fortaleza, sus principales figuras tenían a su disposición, como llegaron a llamarlas algunos, las “chulerías del poder” y el aparato federal era amigo y practicante de una lenidad selectiva. Era la Edad de Oro rojiazul que vino luego de la alegre Edad de las Mentiras Muñocistas.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: