Decir que la desaparición de las salas de parto responde exclusivamente a la escasez de obstetras es una percepción incompleta de la realidad, escribe Nabal Bracero
Decir que la desaparición de las salas de parto responde exclusivamente a la escasez de obstetras es una percepción incompleta de la realidad, escribe Nabal Bracero
El valor de los cuidados obstétricos que nuestras madres, esposas y hermanas necesitan no se puede medir por la cantidad de unidades de parto disponibles, sino por la calidad de los servicios ofrecidos. Los cierres de las salas de parto que han ocurrido, y que seguirán ocurriendo, responden a una reorganización orgánica de la estructura médico-hospitalaria debido a varias razones. Veamos.
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