Lo recuerdo como si hubiese ocurrido ayer mismo, aunque han pasado ya muchas lunas. Luego de ahorrar por mucho tiempo mis padres lograron el sueño de comprar su propia casa. Era una casa nueva así que mis hermanos y yo estábamos más contentos que si hubiera sido la Navidad. La única controversia era cual cuarto escogería cada cual.
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Cuando las palabras solas no bastan