Al Estado le resta rectificar medidas - normativas o institucionales- y demostrar que sus procesos son antidiscriminatorios. La bola está nuevamente en su cancha, escribe Carmen Chazulle Rivera
Al Estado le resta rectificar medidas - normativas o institucionales- y demostrar que sus procesos son antidiscriminatorios. La bola está nuevamente en su cancha, escribe Carmen Chazulle Rivera
El caso de Ashley Marie Torres Feliciano ha sido expuesto en los medios de comunicación por enésima vez en Puerto Rico, en la prensa norteamericana y latina, sobre todo en estas últimas semanas. Y con toda razón. La injusticia carcome. Una menor de edad enjuiciada como adulta y víctima de violencia de género por su expareja condenada a 111 años de cárcel sin haber ejecutado el asesinato contra su hermano en una reyerta muy confusa.
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