Hemos empezado una temporada muy intensa de esporas de hongos. Todavía nos faltan dos meses; no pueden bajar la guardia, escribe Benjamín Bolaños Rosero
Hemos empezado una temporada muy intensa de esporas de hongos. Todavía nos faltan dos meses; no pueden bajar la guardia, escribe Benjamín Bolaños Rosero
Las esporas de los hongos son como las semillas de las plantas, que le permiten al hongo dispersarse en la naturaleza (con la ayuda del viento, pues son microscópicas) y colonizar nuevos ambientes. Los hongos producen diariamente millones de esporas que les garantizan el éxito en esta tarea. Desafortunadamente, estas esporas contienen proteínas que pueden ser alergénicas. Además, hay componentes en la pared celular de las esporas que pueden producir inflamación en el sistema respiratorio, lo que podría aumentar la susceptibilidad a infecciones respiratorias por virus.
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