Nuevamente la profesión de los relacionistas obtiene relevancia, en medio de la cobertura del juicio contra el productor de televisión Sixto Díaz Colón, mejor conocido como Sixto George. En el juicio que se ventila en el Tribunal Federal esta semana han vuelto a surgir las confusiones entre quienes hacen propaganda versus el ejercicio ético de las relaciones públicas como parte de un esfuerzo de comunicación. En medio de todo esto, surge el tema de los “war rooms” en un reportaje de la periodista Laura M. Quintero, que publica este diario reseñando la vista de ayer martes 24 de enero.
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